El procedimiento judicial contra Anabel Pantoja y su novio, David Rodríguez, que han tenido a su hija Alma 18 días en un hospital, comenzó el 20 de enero en el Juzgado de Instrucción número 3 de Las Palmas de Gran Canaria, tras la recepción de un informe del Hospital Universitario Materno Infantil de Gran Canaria del 17 de enero (la niña ingresó en la UVI el día 9).
Dicho informe alertaba sobre la existencia de lesiones en la menor, lo que llevó a la apertura de diligencias el 21 de enero contra los padres. Se trata de un proceso protocolario que se realiza cuando un bebé ingresa por lesiones en un centro hospitalario.
Ahora, tras la evaluación de un peritaje forense, la justicia busca esclarecer el origen de las lesiones y garantizar su protección. Tanto Anabel Pantoja como David Rodríguez declararon el 27 de enero en calidad de investigados y con asistencia legal, pero en ningún momento fueron detenidos.
Posteriormente, el caso fue trasladado al partido judicial de San Bartolomé de Tirajana, donde presuntamente ocurrieron los hechos, ya que el lugar donde viven (Arguinedín, en el municipio de Mogán) no tiene juzgado propio. En todo momento, se les garantizó que habría absoluta discreción, por ello, fuentes cercanas a Anabel no entienden cómo se ha filtrado.
Además, comparten la preocupación de la influencer y su pareja: «Es un horror, porque algunos medios están convirtiendo un protocolo ordinario en titulares alarmistas».
Según ha podido saber Hola, desde el entorno de Anabel, niegan tajantemente los hechos por los que se les investiga. El Juzgado de Las Palmas de Gran Canaria no acordó ninguna medida cautelar, tras tomar declaración a los progenitores, ni en lo que se refiere a la situación personal de los investigados, ni sobre la tutela de la bebé.