Publicado: enero 20, 2025, 1:20 pm
Un sombrero del diseñador Eric Javits se ha interpuesto este lunes entre el 47 presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su esposa, Melania. El nuevo líder estadounidense no pudo besar a su mujer durante su acto de investidura por culpa, aparentemente, del ala del sombrero, que durante todo el acto tapó la cara de la ya primera dama.
Así, el afecto entre la pareja se quedó en un beso al aire después de que el ya presidente de EEUU levantara la ovación de todos los presentes en el Capitolio de Washington, donde se produjo la solemne ceremonia. Melania, impertérrita, no se inmutó y el beso de Trump se quedó en el aire, sin llegar a destino, y su sombrero, donde se mantuvo durante todo el acto, tapando su rostro.
El gorro, de color negro con una banda blanca pegada al ala, cubría los ojos y casi la mitad del rostro de Melania y fue lo más comentado a nivel estilístico en un día de enero en que predominaban la ropa sobria y las cabezas descubiertas. Además, la esposa del presidente se había colocado junto a su hijo Barron, el más alto de todos los invitados, y no hizo el menor esfuerzo por recolocarse el sombrero para que se le pudieran ver los ojos.
El foco ya estaba puesto en el matrimonio, que no vive por primera vez un momento poco cariñoso en público, ya que los desplantes entre ambos vienen ya de lejos. La primera dama no habría llevado bien la vida pública durante el primer mandato de Trump y ahora, según indican medios como CNN, no tendría intención de mudarse a la Casa Blanca a tiempo completo.
Es más, una de las primeras decisiones de Melania ha sido no acudir a la reunión previa al acto de este lunes en el Despacho Oval de Trump con el líder saliente, Joe Biden. Se espera que Melania pase la mayor parte de su tiempo entre la ciudad de Nueva York y Palm Beach, Florida, indica el mencionado medio, donde también ponen de manifiesto que sí estará presente para eventos importantes y tendría su propia plataforma y prioridades como primera dama.
