La esposa británica del expresidente sirio, Bachar al Asad, no estaría buscando el divorcio según ha informado este lunes un portavoz del Kremlin después de que varios medios turcos y árabes aseguraran que Asma al Asad había pedido la separación.
Estos medios de comunicación señalaban, además, que Asma había expresado su descontento con su vida en Moscú, donde ella y su marido han recibido exilio tras huir de Siria, y su intención de volver a Reino Unido, de donde es originaria.
Tras ser preguntado por ello, Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, ha indicado que estas informaciones «no pertenecen a la realidad» y ha negado también otros informes que señalaban que Al Asad había sido confinado en Moscú y que sus activos inmobiliarios habían sido congelados.
Antes de estas informaciones, el ministro de exteriores de Reino Unido ya había informado de que a pesar de que Asma al Asad cuente con la nacionalidad inglesa, además de la siria, no se la dejará entrar en el país.
Asma al Asad nació en 1975 en la capital inglesa y se formó en el King’s College. Es hija de un cardiólogo y de madre diplomática destacada en la embajada de Siria. Licenciada en Informática y en literatura francesa, comenzó a trabajar en el Deutsche Bank hasta JP Morgan en la sede de Nueva York.
A los 25 años se casó con Bachar al Asad, que era un médico oftalmólogo de origen sirio y que trabajaba en el Western Eye Hospital de Londres. La joven aspiraba a una vida cómoda en Inglaterra, pero en el año 2000, la muerte de su suegro, el dictador Hafez al Asad, y la de su cuñado precipitó el retorno de su marido a Siria para ocupar su lugar.