Las pensiones contributivas subirán un 2,8% el año próximo, pero las mínimas lo harán un 6% y las no contributivas aumentarán un 9%, igual que el ingreso mínimo vital (IMV). El Consejo de Ministros ha aprobado este lunes un Real Decreto-ley que incluye la revalorización de las pensiones del sistema de la Seguridad Social, de clases pasiva y de otras prestaciones públicas para 2025 y ha dado vía libre a la «cuota de solidaridad» que pagarán los sueldos más elevados para sostener las pensiones , así como a la subida del Mecanismo de Equidad Intergeneracional al 0,8%. El alza de las pensiones contributivas es el resultado del índice de precios de consumo (IPC) medio entre diciembre de 2023 y noviembre de 2024, según la fórmula establecida en la ley de pensiones. La revalorización supondrá, aproximadamente, 600 euros adicionales al año para las personas con una pensión media de jubilación, mientras que las pensiones medias del sistema aumentarán en torno a 500 euros anuales. Este incremento beneficiará a los cerca de 9,3 millones de personas que reciben 10,3 millones de pensiones contributivas, además de las 720.148 pensiones correspondientes al Régimen de Clases Pasivas del Estado. Así, un pensionista que perciba una pensión de 1.441 euros al mes (coincidente con la pensión media de 2024 de jubilación) pasará a recibir en 2025 una pensión de 1.481,35 euros mensuales, lo que supone un incremento de 564,87 euros anuales. El complemento para la reducción de la brecha de género se revaloriza un 8,1% sobre la cuantía reconocida en 2024 y alcanza el importe de 35,9 euros al mes por hijo.El Gobierno también ha acordado este lunes un incremento de las pensiones mínimas, de las no contributivas (PNC) y del ingreso mínimo vital. Las mínimas del sistema subirán alrededor del 6% en 2025, según el Ministerio de Seguridad Social. No obstante, este porcentaje es mayor para pensiones con cónyuge a cargo y de viudedad con cargas familiares que aumentarán un 9,1%. Las pensiones no contributivas y el Ingreso Mínimo Vital se revalorizarán un 9%. Mientras, las pensiones SOVI (seguro obligatorio de vejez e invalidez) se revalorizarán un 6% para 2025, lo que supone alcanzar los 560 euros mensuales en el caso de las no concurrentes, y los 543,60 euros mensuales para las concurrentes. Y la pensión mínima de jubilación para los hogares unipersonales se fija en 12.241,6 euros anuales (frente a los 11.552,8 euros de 2024) y de 15.786,4 euros en los casos con cónyuge a cargo (en 2024 ha sido de 14.466,2 euros). La asignación por hijo a cargo o menor con discapacidad reconocida igual o superior al 65% alcanza en 2025 los 5.805,6 euros al año, mientras que la asignación por hijo a cargo o menor con discapacidad reconocida igual o superior al 75% se sitúa en 8.707,2 euros anuales, es decir, un incremento interanual del 2,8%. El Consejo también ha dado vía libre a la subida del Mecanismo de Equidad y a la ‘cuota de solidaridad« que pagarán los sueldos más elevados para sostener las pensiones. En este último caso el tipo de cotización aplicable será progresivo en función de los tres tramos de rendimientos fijados (0,92%, 1% o 1,17%) y se incrementará gradualmente a partir de 2025 hasta el año 2045, donde se alcanzará el tipo definitivo. Por su parte, la cotización del MEI queda en el 0,8%, con una distribución del 0,67% a cargo del empresario y del 0,13% del trabajador. La base máxima de cotización aumenta en 2025 de manera acorde con el incremento de la inflación y un porcentaje adicional. Para asegurar el carácter contributivo del sistema de Seguridad Social, este incremento estará acompañado de una subida de la pensión máxima (3.267,60 euros al mes).