«Es el mejor momento para formar parte de la economía madrileña». La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, inauguró con frases como esta la primera edición de Madrid Investment Forum , celebrado en tres días del pasado noviembre en Alcobendas, Leganés, Las Rozas, Aranjuez, Torrejón de Ardoz y Madrid capital, con el patrocinio de Santander, Oracle, la Cámara de Comercio de Madrid y Ceapi (consejo empresarial formado por 320 presidentes de las mayores empresas iberoamericanas que apuestan por fortalecer la red de relaciones y el espacio empresarial). El evento fue organizado por Invest in Madrid (agencia de atracción de inversión extranjera de la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo) que, además, presentó en la clausura el primer ‘Informe de Huella de la Inversión Extranjera’, que se suma a iniciativas como la puesta en marcha del Catálogo de Proyectos Estratégicos y a acciones como la Línea Abierta contra la Hiperregulación, la Ley de Mercado Abierto, la Aceleradora de Inversiones o las dos últimas ‘leyes Ómnibus’ aprobadas. Las jornadas, que contaron con más de 1.000 empresarios, inversores y asistentes de más de 40 países, incidieron en la importancia de la confianza, a partir de aspectos como la seguridad jurídica (y física) y los « impuestos no confiscatorios » y, en todo caso, en la relevancia de la colaboración público-privada para poder captar la atención del capital extranjero y promover la inversión en sus localidades en todo tipo de sectores, como los casos de aeroespacial y defensa; automoción, movilidad y logística; centros de datos y digitalización, IA, industria farmacéutica y biotecnología, microelectrónica y semiconductores, videojuegos y sector audiovisual (todos contaron con representación en las jornadas). De hecho, el presidente de CEOE, Antonio Garamendi, destacó durante su intervención cómo «inversión es la palabra mágica que necesitamos para que nuestra sociedad funcione mejor, y para ello, son esenciales la confianza, la seguridad jurídica, la estabilidad institucional, etc.». Isabel Díaz Ayuso resaltó cómo la Comunidad de Madrid recibe «inversión de 110 países, y atrae 8.000 millones de euros en inversión extranjera, dos de cada tres euros invertidos en España». Como destaca Luis Socías, director ejecutivo de Invest in Madrid: «Nuestro liderazgo es fruto de la confianza, de nuestra bienvenida a las iniciativas privadas, como se demuestra con el Informe de Huella de la Inversión Extranjera, elaborado no sólo para dar importancia a los datos (como que 15.548 empresas de capital extranjero generan más de 500.000 puestos de trabajo en la región y una facturación conjunta de 537.531 millones de euros), sino también para calcular lo que supondría que no estuvieran». Entre las variables del informe se señala cómo el crecimiento sostenido del stock de Inversión Extranjera Directa (IED), con 380.000 millones de euros en la región en 2022, procede de países como Estados Unidos (13,9% de las empresas), seguido de Francia (11,5%), Luxemburgo (11,3%), Reino Unido (10,1%), Países Bajos (7,2%) y Alemania (6,2%). Países objetivo de las misiones comerciales emprendidas por la Comunidad de Madrid, como destaca Socías: «En 2024 hemos realizado diez de ellas, tres de ellas con la presidenta (Alemania, Chile y Corea del Sur). Son acciones económicas para impulsar nuestra agenda internacional, muy focalizada en sectores y mercados estratégicos. Como solemos decir, no es casualidad, sino causalidad, coherencia y ya estamos preparando las del próximo año». El mencionado informe también destaca magnitudes como la recepción del 60,5% de toda la inversión recibida en España desde 1993, el 68,9% del stock de inversión y el 31,4% del stock de empleo ligado a la inversión extranjera directa (y es la sede del 43,5% de las empresas de capital extranjero). Y en el ámbito de la sostenibilidad se ha producido un incremento de los proyectos ‘greenfield’ respecto a 2022, al tiempo que las apuestas de grandes multinacionales se refuerza, con casos como los de la argentina Globant (abre un centro de IA en Madrid con una inversión de 250 millones en España), Stellantis (unas nuevas instalaciones para el ensamblado de baterías para los Citroën ë-C4 y ë-C4, con capacidad de producción de 50.000 baterías anuales), ING ha elegido la región como su sede central en banca de inversión para toda Europa, Microsoft consolida su apuesta por Madrid con la apertura de su primera región ‘cloud’ en España, etc. En este contexto, y durante el foro organizado por ABC y Acciona, ‘Oficinas sostenibles para la regeneración urbana’ (celebrado el pasado 4 de diciembre), Andrés Pan de Soraluce, CEO de Acciona Living & Culture, señaló la necesidad de «incrementar aún más los esfuerzos en la atracción de empresas a edificios de oficinas en la Comunidad de Madrid». Una petición en línea por lo conseguido en Ombú Madrid en Méndez Álvaro, una actuación en la que colaboraron Acciona y la también presente en el foro CBRE para «revalorizar la zona sur de Madrid, con un esfuerzo colaborativo sobre una nave de 1903 que se ha convertido en uno de los edificios más sostenibles del mundo, con un parque de una hectárea y que ha incidido directamente en el barrio, revalorizando las superficies destinadas a oficina y el ‘built to rent’ para un público joven». Un indudable foco de interés que ha conseguido atraer a Electronic Arts y 600 de sus empleados. El informe de OBS Business School ‘Inversión extranjera directa’, dirigido por el profesor y vicepresidente de RS Corporate Rodrigo Yagüe y publicado el pasado abril, señalaba cómo, dentro del incremento de un 54% de inversión extranjera en nuestro país, la región madrileña estaba seguida (tres primeros trimestres de 2023) por Cataluña, País Vasco, Asturias y Andalucía, con Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania como principales inversores. «Generación de empleo, transferencia de tecnología, desarrollo de infraestructuras y estímulo a la actividad económica» son vectores a destacar según el estudio que también señala desafíos como «las cuestiones relacionadas con la soberanía económica, la competencia desleal o la dependencia de inversionistas extranjeros». Y, en todo caso, las pertinaces «tensiones geopolíticas, económicas y monetarias que han aumentado la incertidumbre de los inversores». «La Comunidad de Madrid se ha consolidado durante los últimos años (comenta Yagüe) como uno de los destinos más atractivos en cuanto a recepción de inversión extranjera de toda Europa. Sobre todo durante el año pasado atrajo más de la mitad de la inversión que llegó a toda España, y no es casualidad sino que lo justifican varios factores, como en el caso de su gran conectividad estratégica (en el centro de España, nexo entre Europa, América Latina y África), con uno de los aeropuertos más visitados de Europa, una buena red ferroviaria, buenas carreteras que garantizan una buenísima conexión interna». El entorno empresarial y fiscal muy competitivo («los impuestos regionales son más bajos que otras comunidades autónomas, por ejemplo, el impuesto de patrimonio, el de sucesiones y donaciones, menor IRPF…»), un mercado laboral flexible y el apoyo a la innovación explican cómo «Madrid recibe el 60% de la inversión extranjera, mientras que Cataluña sólo atrae el 15%, siendo regiones con un PIB similar». Yagüe suma factores a la nómina como las infraestructuras modernas, los parques tecnológicos y empresariales, los clusters, «algunas de las mejores universidades de España e incluso de Europa que garantizan un flujo constante de talento altamente cualificado». Vectores de desarrollo destacados durante las jornadas de Madrid Investment Forum, donde se subrayó la esencial importancia de la formación (no sólo en todas la etapas de las ‘edades del alumnado’, sino con certificaciones, como en el caso de las propias de la transformación digital para poder satisfacer las crecientes necesidades del mercado). Formación en tecnología fundamental para emprender la ruta de futuro que destacó Juan Manuel López-Zafra, director general de Economía de la Comunidad de Madrid durante su ponencia ‘Madrid, a la captura de las oportunidades de la nueva economía digital’, donde destacó las políticas de la región para liderar la innovación tecnológica a nivel europeo. En todo caso, las jornadas destacaron la importancia de la calidad de vida en la Comunidad de Madrid a la hora de atraer empresas (y a sus empleados) para emprender una nueva etapa en sus vidas, como comentó más de un responsable extranjero. Y también la relevancia de Ifema Madrid (cuyo vicepresidente ejecutivo, Daniel Martínez, estuvo en una de las jornadas). Como subraya el director ejecutivo de Invest in Madrid: «Es el mejor ejemplo, el más tangible, de colaboración público-privada , toda una referencia. Un activo fundamental de atracción turística y de negocio y de actividad económica, y un compañero de viaje en nuestras delegaciones comerciales, como ha sucedido en la reciente a Corea del Sur». Un contexto internacional que protagonizó parte del encuentro celebrado en Aranjuez, bajo el título ‘Madrid, capital cultural y puerta de entrada de Hispanoamérica’. Cuestión, en suma, de confianza, para atraer inversiones a Madrid y, por lo tanto a España. Así se destacó en el Foro ABC Empresa ‘Estrategias para la atracción de inversión extranjera’ , celebrado el pasado octubre con representaciones de las CC.AA. de Madrid, Valencia y Extremadura y asociaciones empresariales. Y de empresas, como en el caso de la tercera mesa redonda, ‘La confianza como activo clave para la decisión de inversión’, que contó con la participación de Francisco Ruiz Carrasco, managing director de Benbros Energy; Guillermo de Juan, vicepresidente de la farmacéutica GSK España y director en Europa de Relaciones Institucionales y Comunicación, y Juan Antonio Delgado, director de Relaciones Institucionales de Stadler Valencia. «En nuestro caso –apuntó Ruiz Carrasco– es muy importante la voluntad política y el acompañamiento al proyecto. Son proyectos con inversiones muy grandes, un ámbito de actuación a muy largo plazo, 20-25 años mínimo, y necesitan, primero, que haya una voluntad política clara de que el proyecto aporte valor a la región, que se desarrolle conforme proceso ordenado y en un tiempo razonable». De Juan destacó la importancia de contar con apoyos «en un sector hiperregulado en el que tener un medicamento implica una inversión media de 2.500 millones de euros, un tiempo de entre 10 y 13 años», y Delgado apuntó cómo «cada nueva norma, cada nueva decisión afecta a la productividad, en positivo o en negativo. A veces se echa de menos que se analice a posteriori si una determinada norma favorece la productividad de la empresa».