La psoriasis es una enfermedad de la piel muy extendida, en la que la afectación de las uñas es un síntoma habitual. Muchos pacientes con psoriasis presentan cambios en las uñas que se parecen morfológicamente a los de la onicomicosis.
La psoriasis ungueal generalmente se considera difícil de tratar porque la placa de las uñas es una estructura de gel hidrófilo densamente queratinizado, que si bien es resistente, puede impedir la penetración de agentes tópicos para eliminar las antiestéticas manifestaciones en la raíz de las uñas.
Qué es la psoriasis ungueal y qué síntomas manifiesta
La mitad de los pacientes con psoriasis (enfermedad de la piel que causa un sarpullido con manchas rojas y escamosas que pican) van a manifestar alteraciones visibles en sus uñas. De hecho, en el 80 por ciento de los casos, estas señales físicas en las uñas son el primer indicio que avisa de que la psoriasis está provocando inflamación en las articulaciones.
En cuanto a esos síntomas de los que hablamos, pueden aparecer en forma de pequeñas hendiduras en los bordes; con cambios de color marrón en la superficie; e incluso modificaciones de la estructura, que se deforma y se engrosa.
Cuándo acudir al dermatólogo si mis uñas han cambiado
Como comentábamos, unas uñas ‘feas’, con cambios de color y forma nos avisan de que podemos padecer psoriasis. También al contrario, si ya padecemos esta enfermedad cutánea, y vemos que nuestras uñas cambian, es el momento de consultar con el dermatólogo, para que estudie nuestra posible psoriasis ungueal.
Es cierto que puede resultar difícil distinguir lo que es una psoriasis ungueal de otro tipo de afectaciones en las uñas, como hongos o debilitamiento superficial por manicuras etc… Para tener clara la diferencia, debemos saber que la dolencia que nos ocupa se manifiesta sobre todo en las uñas de las manos (no en las de los pies).
Otra señal de psoriasis es que veamos varias uñas deformadas, y que el mal aspecto afecte a casi toda su superficie. Además, esta psoriasis ungueal puede cursar con dolor.
Cómo mantener a raya la psoriasis ungueal
En cuanto a lo que está en nuestras manos para intentar prevenir o mantener las uñas lo más saludables posible, desde Lilly recomiendan llevar siempre nuestras uñas perfectamente cortadas, para evitar que se despeguen al engancharse con la ropa.
Siempre que vayamos a realizar alguna actividad manual, conviene usar guantes, sobre todo si vamos a manipular productos químicos. La hidratación es enemiga de la psoriasis: aplicar crema hidratante tras el lavado de manos puede ayudar a retener la humedad que nuestra piel necesita, y que la psoriasis reseca en exceso.
Para finalizar con los consejos para el cuidado de las uñas de las manos, es mejor no empujar ni cortar las cutículas que podría provocar una infección; secarlas perfectamente siempre; no morderlas ni aplicar uñas postizas encima para camuflar la deformidad. Si lo hacemos, aumentaremos el riesgo de que nuestras uñas se separen de los dedos, un problema muy común en la psoriasis ungueal.
Referencias
J. Salomon, J.C. Szepietowski, A. Proniewicz. ‘Psoriatic nails: a prospective clinical study’. J Cutan Med Surg, 7 (2003), pp. 317-321. https://journals.sagepub.com/doi/10.1007/s10227-002-0143-0
E. Canal-Garcíaa, X. Bosch-Amateb, I. Belinchónc, L. Puig. ‘Nail Psoriasis’. Actas Dermosifiliogr. 2022;113:481-9010.1016/j.ad.2022.01.006. https://journals.sagepub.com/doi/10.1007/s10227-002-0143-0 https://www.actasdermo.org/es-nail-psoriasis-articulo-S0001731022002770