Publicado: noviembre 5, 2024, 12:00 am
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El clima de violencia e inseguridad sí puede estar detrás del flujo de remesas que están llegando a América Latina, pero a través de la emigración que están originando, revela información recabada por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
De acuerdo con ellos, el recrudecimiento de la violencia en los países de Centroamérica, Panamá y República Dominicana incentiva los flujos de migración y estaría detrás del consistente aumento de las remesas que se ha presentado en los últimos años.
Funcionarios en Washington admitieron que México puede estar incorporado en las características de Centroamérica, sobre todo en lo que respecta a la emigración.
Al interior del “Panorama Económico para el Hemisferio Occidental del FMI”, detallaron que el aumento de las remesas no está asociado con un mayor Producto Interno Bruto (PIB); no obstante, que sí se ha presentado un impulso al consumo y mayores importaciones en lugar de bienes y servicios producidos internamente, a partir de la mayor entrada de remesas.
En todo caso, “el vínculo de las remesas es negativo porque refleja que los mismos factores que impulsan a la emigración, que son la alta criminalidad y baja gobernanza, también reducen el crecimiento del PIB”.
Cuando una economía crece a partir de la Inversión Extranjera Directa (IED), se presenta un desarrollo multiplicador, detallaron, pues se realiza una transmisión de tecnología.
Tal como lo plantean los expertos del FMI, “es probable que la gobernanza y la inseguridad desempeñen un factor también clave en los flujos de la IED.
“Una mejor gobernanza se asocia con mayores entradas de IED, mientras que una mayor delincuencia se asocia con una mayor emigración y remesas”.
Según el análisis, en Centroamérica, Panamá y República Dominicana, se ha tenido una gobernanza más débil en los últimos 25 años y más criminalidad.
IED y gobernabilidad
En el mismo reporte subrayaron que el alto crecimiento induce más entradas de IED.
De hecho enfatizaron que “mejor gobernabilidad está asociada a mayores flujos de IED, mientras el crimen está asociado con mayor emigración y un consistente aumento de las remesas al país de origen”.
De manera que para crecer más rápido, se necesita atraer más inversión extranjera, en particular mejorando el clima empresarial, la seguridad y la gobernanza.
Información del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA) confirma que la población mexicana inmigrante en Estados Unidos presentó un aumento significativo en el 2023, luego de siete años de disminución.
Así, el año pasado la población total de origen mexicano en EU representó 3.26% de la población total de aquél país.
La información de Banco de México muestra que el flujo acumulado de los ingresos por remesas en los últimos 12 meses, de octubre de 2023 a septiembre del 2024, se situó en 64,614 millones de dólares, un nivel sin precedente para un periodo similar.
Según el FMI, “la delincuencia en América Latina es un desafío importante para el desarrollo económico, siendo la seguridad la principal preocupación de los hogares de la región”.
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