Cuando comenzamos una relación amorosa, a menudo nos hacemos mil preguntas sobre el futuro que nos espera, la compatibilidad real de nuestras personalidades, y cuál debe ser la mejor manera de ir avanzando para que nada se estropee. Entre todas las teorías que podemos poner en práctica para averiguar ‘el futuro’, hay una que destaca: el método de la cebolla.
Como metáfora de lo que significa esta teoría, la psicología pone como ejemplo una cebolla, que está formada por multitud de capas que hay que ir abriendo poco a poco si queremos llegar hasta el corazón de esta verdura tan popular. Pues algo similar es lo que defiende la teoría psicológica de la cebolla: la necesidad de ir descubriendo nuevas capas para llegar a una relación exitosa con nuestra pareja.
¿En qué consiste el método de la cebolla para conocer a tu pareja?
De la misma manera que una cebolla tiene capas más superficiales y otras más profundas, la teoría psicológica de la que hablamos propone ir descubriendo cada capa de nuestra pareja, con el objetivo de llegar hasta el fondo de su personalidad y detectar hasta qué punto es compatible con nosotros.
Las capas más externas de la ‘cebolla’ emocional de nuestra relación son las que nos van hablando de los gustos más superficiales, de su comida favorita, de sus preferencias con la ropa, de la música que más le hace vibrar… Según vamos profundizando, empezamos a saber de su ideología, experiencias personales buenas y malas, sus valores reales, lo que le emociona, o su generosidad en la adversidad, por ejemplo. En el corazón están los miedos, las inseguridades y los deseos más íntimos.
A pesar de que las capas externas son las que cogemos con más entusiasmo, porque se van revelando al comienzo de la relación, son las capas más internas las que de verdad nos van a dar la información que necesitamos sobre la compatibilidad y las posibilidades de futuro en nuestra relación. Las capas más profundas necesitan de un grado superior de confianza, puesto que no se dejan ver tan fácilmente.
¿De qué depende que una pareja dure o no?
Los psicólogos consideran que el problema de nuestra sociedad consiste, básicamente, en que la mayoría nos quedamos en las capas más superficiales de la cebolla, y nunca llegamos realmente a profundizar en el corazón del otro. Por eso, en muchos casos, la relación amorosa termina por no funcionar, porque se basa en frivolidades como el aspecto físico y no en sentimientos arraigados.
El hecho de compartir los mismos gustos musicales, por ejemplo, es ‘pan para hoy y hambre para mañana’, porque eso no va a sostener el peso de una relación a largo plazo. Lo que la sostiene de verdad es la compatibilidad en cuanto a creencias, valores, y sentimientos.
En las relaciones, una retirada a tiempo es una victoria
El gran problema surge cuando las parejas se quedan en la superficie, en el día a día más terrenal y práctico, y no ahondan en lo que les va a llevar a una relación duradera. El tiempo va avanzando, y la pareja genera un compromiso que no se ha fundamentado en nada sólido, que se ha tejido con material frágil y, en cualquier momento, va a romperse.
Es por esta razón que los expertos aconsejan que analicemos la ‘cebolla’ en todas sus capas, empezando por las más superficiales, sí, pero entrando en faena sin miedo, y sin mirar para otro lado. Ésta será la única manera de ser conscientes de las señales que la incompatibilidad va mostrando, para poder tomar decisiones antes de que sea tarde y estemos tan metidos en la relación que no sepamos (o no queramos) cómo salir de ella.
Tampoco es una buena idea, al detectar esas advertencias de que posiblemente no estemos junto a la persona correcta, pensar que no pasa nada porque vamos a conseguir cambiarla con el tiempo. Este es, según los psicólogos, el gran error que comete la mayoría. La verdadera esencia de una persona adulta es casi imposible que cambie, y hay que afrontarlo cuanto antes para no ‘perder el tiempo’.
Referencias
Irwin Altman y Dalmas Taylor. Libro precursor de la teoría de la cebolla: ‘Social Penetration: The Development of Interpersonal Relationships’. https://www.tandfonline.com/doi/pdf/10.1080/00224545.1968.9712476