Sigue el goteo de acusaciones contra Sean Combs, más conocido como Puff Diddy. El artista se podría enfrentar a una condena de cadena perpetua, la pena que se pedirá para él en el juicio fechado para el próximo 5 de mayo, donde se le acusa de tráfico sexual, crimen organizado y trata de personas —a lo que se pueden añadir otros cargos como pederastia—.
Hace unos días, en otra reciente demanda civil que recibió el rapero y magnate musical de 54 años y que fue presentada el pasado 20 de octubre, un hombre anónimo —ha utilizado el conocido alias John Doe para preservar su intimidad— aseguró que Diddy intentó agredirle sexualmente y que no lo consiguió gracias a la intervención de un atleta profesional.
Ahora son dos hombres los que acusan a Sean Combs de abusar de ellos sexualmente y, en el caso del primero, de violarle, hace dos décadas, cuando tenían apenas 10 y 17 años, respectivamente.
Según El País, los hechos habrían ocurrido en 2005 y 2008, cuando el artista ejerció su poder sobre ellos, prometiéndoles carrera en la industria musical. Con estas, son ya 135 las demandas que acumula el magnate.