Publicado: septiembre 21, 2025, 9:23 am
En España, la mayoría de los hogares tienen Wi-Fi particular. En pleno auge de los ataques digitales, algo tan cotidiano como tu router doméstico puede convertirse en un eslabón débil si no se gestiona adecuadamente.
Muchos routers siguen activando de fábrica la función WPS (WiFi Protected Setup). Lo que pocos saben es que esta opción es una de las vías más explotadas para acceder a redes domésticas.
La función WPS, diseñada para conectar dispositivos al Wi-Fi pulsando un botón o introduciendo un PIN corto, resulta cómoda… pero también peligrosa. Mantenerla activa permite que ciberdelincuentes con herramientas específicas puedan descifrar el PIN o aprovechar vulnerabilidades antiguas para entrar en tu red.
Así, dejar activado el WPS cuando no se utiliza puede abrir la puerta a posibles ciberataques.
En este artículo te explicamos por qué desactivar el WPS mejora significativamente tu seguridad, cómo hacerlo y qué otras medidas simples puedes tomar para proteger tu conexión de intentos de intrusión.
¿Por qué debemos apagar el botón WPS si no lo utilizamos?
Pese a ser un método rápido y seguro, siempre que se haga en una red cerrada y privada, el WPS cuenta con algunos peligros que conviene tener presentes. Al usar esta función del router, nuestra red queda abierta y accesible para cualquiera. Si bien, lo normal es tener que introducir el PIN WPS para conectarse, sigue siendo mucho más sencillo descifrar un código de 8 dígitos que una contraseña larga y segura como la que traen los routers.
Los ciberdelincuentes poseen aplicaciones que son capaces de generar estos códigos o incluso sistemas de espionaje que permiten espiar al usuario y controlar sus movimientos cuando están conectados a la red. Esto les permite poder copiar las contraseñas para intentar acceder a las cuentas personales o bancarias y robarte el dinero, así que hay que ser consciente de lo expuesta que queda nuestra conexión.
Este botón se encuentra en el propio router, así que para encontrarlo, basta con echar un vistazo al aparato y descubrir las siglas (WPS) que aparecerán junto al mismo. A la hora de usarlo, es tan sencillo como pulsarlo y que la luz LED comience a parpadear. Para desactivarlo, hay que volver a pulsarlo hasta que las luces ya no parpadeen y, de esta manera, se podrán evitar las potenciales complicaciones mencionadas.