Publicado: noviembre 9, 2025, 7:05 pm
Vallecas es un fortín esta temporada —solo tres tantos ha encajado el Rayo en cinco partidos en casa— y en un templo maldito para el Real Madrid en los últimos años: los blancos, que no ganan en el estadio rayista desde febrero de 2022, no pudieron pasar del empate en la duodécima jornada de Liga, en un partido que no estuvo exento de polémica.
Hasta dos penaltis reclamaron los de Xabi Alonso en su visita a Vallecas, sin que ni el árbitro de campo ni el VAR concediesen la pena máxima al líder de la Liga, que no perderá la cabeza de la tabla aunque el Barça gane en Balaídos este domingo, pues aventaja a los culés en seis puntos.
La primera jugada controvertida llegó superados los 20 minutos de partido, en la ocasión de gol más clara que tuvo el Real Madrid, cuando Bellingham bajó de cabeza al área pequeña un balón picado de Mbappé desde la izquierda para que Vinícius la reventase a puerta. Batalla se hizo gigante para sacar ese balón a bocajarro, mientras el inglés se quejaba de un agarrón de Pep Chavarría que le obstaculizó en el salto.
Siguieron pasando los minutos sin que el conjunto madridista diese con la tecla para perforar la portería de un Augusto Batalla inmenso, que atajó todos los intentos de los blancos para sostener a los suyos y fue elegido mejor jugador del encuentro.
Cuando el pitido final estaba a punto de escucharse en Vallecas, ya con el descuento cumplido, llegó la segunda jugada polémica: Trent colgó un centro al área para que Bellingham tratase de rematar, pero su cabezazo se estrelló en la defensa rayista y salió rebotado sin dueño justo donde Mbappé peleaba con Pep Chavarría, que agarró de la camiseta al francés para impedir su salto. Reclamaron los jugadores del Real Madrid, pero el colegiado señaló saque de puerta y, justo después, el final del choque.
Los blancos se marcharán al parón de selecciones líderes en la clasificación de Liga, con 31 puntos y seis de ventaja respecto al Barça, que tendrá la oportunidad de recortar distancias si consigue ganar al Celta en Balaídos, pero con malas sensaciones tras sus tropiezos en Anfield y el estadio de Vallecas.
