Publicado: diciembre 8, 2025, 7:05 pm
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha dicho este lunes que los socios europeos mantienen una «postura común» sobre la seguridad de Ucrania, tras reunirse en Londres con los líderes del Reino Unido, Francia y Alemania -conocidos en conjunto como el ‘E3’- para abordar el plan de paz impulsado por Estados Unidos.
Al término del encuentro de este lunes en Downing Street, Zelenski se ha mostrado en la red social X «agradecido» con el primer ministro británico, Keir Starmer, el presidente francés, Emmanuel Macron y el canciller alemán, Friedrich Merz, por organizar el encuentro y por sus «contribuciones personales» en el camino para alcanzar la paz.
«Hoy hemos tenido una conversación detallada sobre nuestro trabajo diplomático conjunto con la parte estadounidense, alineamos una posición compartida sobre la importancia de las garantías de seguridad y reconstrucción y acordamos los próximos pasos», ha escrito el presidente ucraniano en la publicación.
«Lo que es crucial hoy es la unidad entre Europa y Ucrania, así como la unidad entre Europa, Ucrania y los Estados Unidos», ha añadido. Del mismo modo, Zelenski ha mencionado que ha hablado con los tres presidentes europeos sobre un «mayor apoyo» en materia de defensa en Ucrania.
En un comunicado emitido posteriormente, un portavoz de Downing Street ha indicado que Starmer, Macron, Merz y Zelenski han acordado que, mientras continúan las conversaciones de paz lideradas por Estados Unidos, Europa debe seguir apoyando a Ucrania. «Europa debe apoyar a Ucrania, reforzando su capacidad de defensa contra los incesantes ataques que han dejado a miles de personas sin calefacción ni luz», reza el escrito.
Desde Londres también han señalado que los líderes han abordado el «progreso positivo» de las conversaciones sobre los activos rusos soberanos inmovilizados para apoyar la reconstrucción de Ucrania y «han instruido» a sus asesores de seguridad para continuar las conversaciones en los próximos días.
Al comienzo de la reunión en Londres, Starmer ha enfatizado la necesidad de un acuerdo de paz justo y duradero para Ucrania, mientras que Macron ha hecho hincapié en las «cartas» que tienen frente a Rusia. Merz, por su parte, ha expresado cierto escepticismo sobre algunos «detalles» del plan de paz estadounidense, sin precisarlos.
En términos generales, los líderes coinciden que la situación atraviesa «un momento crítico» y que «es necesario incrementar el respaldo a Ucrania y mantener la presión» sobre el presidente ruso, Vladimir Putin «para terminar con esta barbaridad de guerra».
Este domingo, el presidente estadounidense, Donald Trump, dijo que a los negociadores de Zelenski les «encanta» el último plan, pero afirmó sentirse «un poco decepcionado» de que el presidente ucraniano «aún no haya leído la propuesta». Mientras, Zelenski señaló que sus negociadores le informarían y que «algunos temas solo se pueden abordar en persona». Al término de esta cita, el presidente ucraniano se dirigió a Bruselas para reunirse con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Von der Leyen: «No hay más tiempo que perder»
Tras Londres, el mandatario ucraniano ha viajado a Bruselas, donde se reunirá con el secretario de la OTAN, Mark Rutte, y la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, para seguir discutiendo las negociaciones sobre una eventual paz en Ucrania. Precisamente, esta última ha declarado este lunes que «no hay más tiempo que perder» para asegurar el apoyo financiero de Ucrania.
Von der Leyen ha señalado, de hecho, que «es un acto crucial para la defensa de Europa». «Todos sabemos lo que está en juego y sabemos que no tenemos más tiempo que perder. Asegurar el apoyo financiero ayudará a garantizar la supervivencia de Ucrania y es un acto crucial de defensa europea», ha afirmado en un comunicado.
La presidenta de la Comisión ha señalado que «en está nueva era, la geoeconomía va de la mano de la geopolítica» y ha asegurado que junto a sus aliados «Europa tiene los medios y la determinación para incrementar la presión sobre Rusia para que se siente a la mesa de la negociación».
