Rafael Louzán, presidente de la Federación Gallega de Fútbol, es el gran favorito de la Asamblea a la presidencia de la RFEF y el aspirante que cuenta con el mayor número de avales. Sin embargo, está por ver si su candidatura puede llegar hasta el final, pues sobre él pesa una condena de inhabilitación que aún no es firme pero no gusta nada en el CSD, algo que ha dejado muy claro su presidente José Manuel Rodríguez Uribes.
«Hay un problema ahí que tiene que ver con su situación concreta de dos sentencias que le condenan por prevaricación [cuando era diputado de la Diputación de Pontevedra], pendiente del Tribunal Supremo, pero también eso genera incertidumbre, ese es el problema real«, ha señalado el secretario de Estado para el Deporte sobre la situación del máximo responsable del fútbol gallego.
Por otro lado, Uribes ha insistido en que «el CSD no debe mandar en la RFEF, tenemos que ayudarnos y colaborar, trabajar en pro del fútbol español, pero esa autonomía debe ser en todas las direcciones, también en relación con los clubes, con LaLiga, es decir, que el presidente que sea elegido sea una persona autónoma, y que tenga capacidad para dirigir con criterio propio la RFEF, y eso es en lo que está el CSD, no está en nada más».
Un candidato, según el secretario de Estado, se presenta «por cuidar el interés general, el prestigio del fútbol, la reputación», por lo que pidieron que «fueran personas que no tuvieran dificultades judiciales». «A partir de ahí, que la propia Federación Española de Fútbol, su asamblea democráticamente elegida, con autonomía, elijan al mejor. Eso es lo que queremos, y que sobre todo que la persona que salga elegida, pues tenga altura de miras, trabaje tendiendo la mano, goce de autonomía», dijo.
Las elecciones se celebrarán el próximo 16 de septiembre, para las cuales el CSD no tiene «favorito». «Tenemos la voluntad de que quien salga trabaje concienzudamente, con mirada alta, en defensa del fútbol español», defendió Uribes.
«Hay tres representantes de tres federaciones importantes y tendrán que elegir al mejor, ahí están también los futbolistas, están los entrenadores. Con la realidad que existe, tenemos ahora mismo unas elecciones que están haciéndose bien, en el sentido que nos comprometimos a ayudar nosotros también con la FIFA y con la UEFA, y de lo que se trata ahora es de que compitan y que gane el mejor», reiteró.
Respecto a que los tres candidatos pertenezcan ya a la estructura de la RFEF, el presidente del CSD fue claro: «La Asamblea es la que es, de acuerdo con la ley, en todas las federaciones deportivas tienen las mismas normas y los presidentes de las federaciones regionales o autonómicas tienen un papel importante y, por consiguiente, esas son las reglas del juego, son los actores naturales, democráticamente elegidos«.
Y así lo han querido «los que han decidido avalar». «Ahí no podemos decir nada, ni podemos ni debemos, y yo creo que hay que hacer la lectura positiva. Ahora hay tres candidatos de federaciones territoriales importantes, uno tiene la situación complicada desde el punto de vista legal, pero los otros dos, pues pueden competir y eso también nos garantiza que haya posibilidades ahora de que cuenten su programa, de que busquen alianzas y el CSD trabajará lealmente, como hacemos siempre, con el que salga elegido», manifestó.
«Sobre todo porque tenemos un Mundial por delante, que nos hace mucha ilusión, que tengamos una federación tranquila, estable, con un presidente nuevo, que busque alianzas, que busque apoyos, que busque el máximo consenso posible y trabajar unidos para sacar adelante a la RFEF y sobre todo para ir de la mano de los éxitos del fútbol español, ahí hay una brecha que yo creo que tenemos que entre todos salvar, y el CSD va a estar siempre, como institución pública, ayudando a que se hagan las cosas bien», deseó.