Publicado: julio 7, 2025, 3:04 pm
La combinación de dos fármacos experimentales ha demostrado ser capaz de inhibir el crecimiento tumoral en el cáncer de ovario, y además, bloquear la resistencia a otros medicamentos, según un estudio realizado en la Universidad Weill Cornell Medicine (EE.UU.). La investigación presenta una estrategia prometedora contra esta forma de cáncer difícil de tratar y demuestra un nuevo y poderoso enfoque para identificar tratamientos eficaces contra cánceres genéticamente diversos. El cáncer de ovario puede ser promovido por mutaciones en muchos genes diferentes. Esto complica el diseño de medicamentos dirigidos a mutaciones comunes. En el estudio, publicado en la revista ‘ Cell Reports Medicine’ , los investigadores se centraron en la activación de vías de señalización del crecimiento específicas de las células tumorales ováricas. De esa forma identificaron una nueva estrategia de tratamiento combinado que ataca selectivamente a las células tumorales ováricas y reduce el crecimiento tumoral en modelos preclínicos . «Creemos que este enfoque será útil para identificar tratamientos eficaces contra otros tipos de cáncer que no presentan mutaciones recurrentes y tratables», afirma el autor principal del estudio, Benjamin Hopkins. A pesar de representar solo el 3% de todos los tumores femeninos, el cáncer de ovario se sitúa como la quinta causa de muerte por cáncer en mujeres. Se estima que en 2025 cerca de 4-000 mujeres serán diagnosticadas con esta enfermedad en España. El tratamiento estándar del cáncer de ovario consiste en cirugía para extirpar los ovarios seguida de quimioterapia , pero la recurrencia es común, y la tasa de supervivencia a cinco años es de solo alrededor del 50%. De ahí la necesidad de nuevos tratamientos más eficaces. Los investigadores estudiaron tumores de ovario y observaron que muchas mutaciones activan una vía de crecimiento llamada MAPK. Probaron varios medicamentos y encontraron que el fármaco rigosertib funcionaba bien contra este tipo de cáncer . Sin embargo, también notaron que al usarlo se activaba otra vía (PI3K/mTOR) que puede causar resistencia al tratamiento. Por eso, lo combinaron con otro fármaco que bloquea esa segunda vía. Esta combinación fue más efectiva que usar rigosertib solo o la quimioterapia común. Hopkins espera que estos resultados generen interés entre los desarrolladores de medicamentos, lo cual podría incluir compuestos similares a rigosertib pero más potentes.