Publicado: abril 9, 2025, 4:07 pm
Un tribunal de Estados Unidos ha ordenado este martes a la Casa Blanca levantar el bloqueo aplicado contra la agencia de prensa Associated Press (AP) para acceder a la Casa Blanca, el Air Force One y los diferentes eventos del Gobierno de Estados Unidos. La agencia fue vetada el pasado 14 de febrero por Donald Trump después de que no se ajustase en sus informaciones al nuevo criterio oficial de denominar al golfo de México como «golfo de América», una de las primeras medidas de la nueva administración.
Ahora, el magistrado Trevor McFadden ordena a la Casa Blanca que rescinda «de inmediato» su negativa a permitir la presencia de AP en eventos abiertos a todos los periodistas acreditados en la Casa Blanca y señaló que estará en vigor «hasta nueva orden». Associated Press, en su guía de estilo, decidió seguir llamando al golfo de México «por su nombre original», aun mencionando el nuevo nombre elegido por Trump, dado que se trata de un cuerpo de agua que comparte frontera con México y Cuba.
El pasado 21 de febrero, la agencia anunció que había demandado a tres integrantes de la Administración republicana. La denuncia, interpuesta en un juzgado de Washington D.C. y de 18 páginas de extensión, alegaba que AP reclamaba su derecho a la independencia editorial y tenía por objetivo prevenir que el Ejecutivo coaccione a los periodistas para que estos usen solo un lenguaje aprobado por el mismo. «La prensa y todas las personas en Estados Unidos tienen derecho a elegir sus propias palabras y a no ser objeto de represalias por ello por parte del Gobierno. La Constitución no permite al Gobierno controlar la libertad de expresión», sostuvo ese medio.
El juez considera que el veto es contrario a la ley
La Administración Trump alegó entonces que AP «simplemente» se negaba a «aceptar la ley». «Se llama golfo de América. Ahora ya no se llama golfo de México. Tengo derecho a hacerlo», recalcó el propio Trump el pasado 18 de febrero.
El magistrado precisa que el fallo no obliga a la Casa Blanca a conceder acceso permanente al Despacho Oval, el Ala Oeste o cualquier evento mediático, ni tampoco otorgar un trato especial a la agencia. El juez, eso sí, reconoce que la exclusión de AP es «contraria a la Primera Enmienda y prohíbe al Gobierno continuar por ese camino ilícito», ya que la Casa Blanca no puede brindar a AP «un trato inferior» al que se le da a otros medios de comunicación acreditados.