Publicado: noviembre 24, 2025, 5:21 pm
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este lunes que viajará a Pekín en abril del próximo año para reunirse con el presidente chino, Xi Jinping, quien a su vez ha sido invitado a Washington para una posterior visita de Estado a finales de 2026.
El presidente de Estados Unidos hizo el anuncio pocas horas después de mantener una conversación telefónica con su homólogo chino, en la que ambos debatieron sobre temas de la agenda bilateral como el fentanilo y la soja, así como de la agenda internacional, centrándose en la guerra de Ucrania y la situación en Taiwán. Hay que recordar que ambos mandatarios se reunieron en persona hace poco menos de un mes en un encuentro en la ciudad surcoreana de Busan.
«Acabo de tener una excelente conversación telefónica con el presidente Xi de China. Hablamos de diversos temas, como Ucrania/Rusia, el fentanilo, la soja y otros productos agrícolas, etc.», escribió Trump en su red social, Truth Social. «El presidente Xi me invitó a visitar Pekín en abril, lo cual acepté; yo correspondí, y él será mi invitado en una visita de Estado a Estados Unidos a finales de año», detalló.
Esta es la primera invitación que Trump extiende para una visita de Estado en su segundo mandato, el máximo nivel de honores que recibe un líder extranjero en la Casa Blanca, que incluye una pomposa ceremonia de bienvenida y una cena de gala.
Trump, que presumió en el anuncio de que las relaciones entre Estados Unidos y China son «extremadamente fuertes», afirmó que la conversación telefónica sirvió para dar seguimiento a la «exitosa reunión en Corea del Sur de hacer tres semanas». «Desde entonces, ambas partes han logrado avances significativos para mantener nuestros acuerdos actualizados y precisos. Ahora podemos enfocarnos en el panorama general», dijo.
Por su parte, Pekín ha confirmado a través de la agencia estatal Xinhua la llamada telefónica y el contenido de la misma, sin confirmar detalles sobre las visitas de Estado. El presidente Xi Jinping insistió en la llamada con Trump sobre la situación de Taiwán y el retorno de la isla a soberanía china como «parte integral del orden internacional de la posguerra», además de expresar su deseo de un «acuerdo de paz justo, duradero y vinculante» sobre Ucrania, según el Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
El tema de Taiwán quedó fuera de la agenda en la reunión que Trump y Xi celebraron tuvieron el pasado 30 de octubre en Busan, en la que acordaron una reducción de aranceles estadounidenses hacia China, la suspensión de las restricciones chinas a la exportación de tierras raras y un pacto sobre la compra de soja estadounidense.
La llamada se produce en un momento de tensión entre China y Japón después de que la primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, afirmara recientemente que el ejército japonés podría intervenir si China tomara medidas contra Taiwán. Unas declaraciones que no han sentado bien en Pekín. Durante el fin de semana, el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, afirmó que Japón «cruzó una línea roja que no debería haberse tocado».
