Publicado: octubre 17, 2025, 5:14 pm
Quedan dos semanas para Halloween, pero en Estados Unidos los festejos han comenzado ya. Esta es una época complicada para la policía: la gran cantidad de personas disfrazadas añade dificultad a su trabajo diario y se mezcla el ambiente festivo con la delincuencia.
Es lo que ocurrió esta semana en Alexandria, Virginia, donde un trío de desconocidos disfrazados con atuendos siniestros aterrorizó a una familia amenazando con entrar en su vivienda.
Tal y como recoge el The New York Post, los tres sospechosos aparecieron en la casa de Alexandria, a unos 13 km de Washington DC, alrededor de las 10 de la noche del martes, según reveló la hija del propietario de la casa, llamada Shayla.
«Al principio pensé que era solo una broma de Halloween, una pequeña travesura», dijo la joven. «Así que dije: ‘¡Feliz Halloween!'». Pero los enmascarados se negaron a irse, por lo que les advirtió que llamaría a la policía, una amenaza que no logró disuadirlos.
«No paraban de tocar la puerta», explicó la joven. «Los golpes se hacían cada vez más fuertes». La cámara de grabación de la puerta grabó a tres figuras, una vestida como el personaje Michael Myers de la saga de películas de terror Halloween, otra como un payaso y una tercera como una monja de aspecto siniestro, golpeando la puerta y exigiendo entrar a la casa.
«¡O sales tú o entramos nosotros! ¡Abrid la puerta!», dijo uno de los sospechosos. Los enmascarados también hicieron gestos amenazantes antes de trasladarse a la parte trasera de la casa. Atravesaron una valla de madera, rompieron las mamparas de la terraza y golpearon las ventanas mientras no dejaban de mirar hacia el interior.
«Golpeaban la ventana», dijo Shayla. «Se me encogió el corazón cuando dijeron que iban a usar una silla para derribar la puerta. Era demasiado», agregó la joven, que añadió que los sospechosos «amenazaron con matarnos». Tras unos 10 minutos de puro terror, los tres supuestos delincuentes finalmente se fueron. En el interior de la casa estaba Shayla, su hermano, su madre y su perro.
«No fue una broma que salió mal. Intentaron entrar a la casa», dijo la joven, que explicó que su madre estaba aterrorizada. «Mi padre falleció hace poco, así que… Me alegro de haber estado allí. Pero ahora tiene miedo. No quiere quedarse sola».
