Se llamaba Al Waleed y pasó 20 años en coma antes de morir: la trágica historia del 'royal' saudí al que llamaban 'El príncipe durmiente' - Argentina
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Se llamaba Al Waleed y pasó 20 años en coma antes de morir: la trágica historia del 'royal' saudí al que llamaban 'El príncipe durmiente'

Publicado: julio 22, 2025, 5:27 am

No ha habido beso que despertara al ‘príncipe durmiente’. Al Waleed bin Khalid Al Saud tenía 15 años cuando sufrió un accidente de coche. Como consecuencia, el príncipe saudí entró en coma y así ha estado durante 20 años, hasta fallecer este sábado. Murió en Riad a los 36 años de edad y su funeral se celebró este domingo en la capital de Arabia Saudí.

«Con un corazón que cree en la voluntad y el destino de Dios, y con profunda tristeza, lamentamos el fallecimiento de nuestro amado hijo, el príncipe Al Waleed bin Khalid bin Talal bin Abdulaziz Al Saud, que Dios lo bendiga. Las oraciones fúnebres se celebrarán el domingo», afirmó su padre, el príncipe Khaled bin Talal, en su cuenta oficial de X. Al tiempo, emitió sus condolencias el Consejo Mundial de Imanes.

Han sido tantos años en coma que Al Waleed se ganó el sobrenombre de ‘príncipe durmiente’. Nació el 18 de abril de 1989 en el seno de la familia Saud, la familia gobernante de Arabia Saudí. Era hijo del príncipe Jalid bin Talal Al Saud y nieto del príncipe Talal bin Abdulaziz Al Saud. Su madre era la princesa al-Jazi bint Saud, hija del rey Saud.

El trágico accidente de 2005

El azar le había situado en un lugar privilegiado. La vida se antojaba prometedora. Y así fue hasta 2005, cuando tenía 15 años y vivía en Londres donde se formaba.

Al Waleed sufrió un accidente de coche mientras se entrenaba en una academia militar. El accidente le causó una grave hemorragia cerebral que lo dejó en coma. Y así ha estado 20 años. En los medios de comunicación se le conocía como el ‘príncipe durmiente’.

Si Dios hubiera querido que muriera en el accidente, ahora estaría en la tumba»

Tras ser trasladado a su país, quedó ingresado en la Ciudad Médica Rey Abdulaziz de Riad, la capital saudí. El príncipe pasó todos esos años recibiendo cuidados médicos intensivos en una habitación privada, con dispositivos de soporte vital como ventilación y alimentación por sonda.

El día en que movió la mano

En todos esos años los informes médicos no registraban cambios ni mejoras de Al Waleed. Sin embargo, la familia sí notaba movimientos ocasionales de manos o pies, que se consideraban signos de una respuesta neurológica.

En los medios de comunicación saudíes y árabes se difundieron vídeos que mostraban algunos breves y tímidos movimientos del príncipe. Había esperanza. En una de esas grabaciones, en 2019, movía la mano en respuesta a una petición de su padre, el príncipe Jaled bin Talal.

Según Roya News, el príncipe Al Waleed «mostró signos de conciencia limitada a través de pequeños gestos, como levantar un dedo o mover ligeramente la cabeza, aunque estos momentos no indicaron un retorno a la conciencia completa». Pero no hubo más. El ‘príncipe durmiente’ no volvió a hacer movimiento alguno.

La esperanza que da la fe

Pese al coma profundo, durante todos esos años la familia se aseguró de que la habitación del hospital estuviera decorada para acontecimientos importantes como el Ramadán, el Eid (la fiesta por el fin del ayuno) o el Día Nacional Saudí, cuenta el Daily Mirror. Aquella habitación de hospital era frecuentada a menudo por visitantes que le ofrecían oraciones y apoyo.

Sólo Dios vive y muere… No perderé la fe en el poder de Alá»

Porque la esperanza es lo último que se pierde. El padre de Al Waleed manifestó en más de una ocasión que aún confiaba en la recuperación de su hijo. Se negaba a retirarle los dispositivos médicos. «Sólo Dios vive y muere», declaró. Según él, el mantenimiento continuado de los dispositivos no interfería en la suerte y el destino del príncipe.

«No perderé la fe en el poder de Alá», declaró Jaled bin Talal en varias ocasiones. «Si Dios hubiera querido que muriera en el accidente, ahora estaría en la tumba», declaró en una ocasión al Economic Times. Pero finalmente ni la medicina ni la fe pudieron cambiar la suerte de Al Waleed. El ‘príncipe durmiente’ falleció el pasado sábado a los 36 años, tras pasar 20 en un sueño.

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