El exdiputado nacional Héctor Recalde, histórico abogado laboralista ligado a los gremios peronistas, murió este lunes a los 86 años. La noticia la confirmó Máximo Kirchner durante la cumbre del peronismo bonaerense que se celebra en la localidad de Moreno.
Se recibió de abogado en la UBA y desde muy joven militó en los gremios peronistas. En 1964 empezó a trabajar como abogado de la CGT y desde entonces estuvo vinculado a distintas organizaciones sociales. Desde ese lugar, construyó una influencia decisiva en el fuero laboral porteño, donde ejerce como camarista su esposa, Graciela Lucía Craig. Tenía tres hijos: Mariano, senador nacional actual y uno de los fundadores de La Cámpora; Mora, y Leandro, que es abogado laboralista y trabajaba con él en el estudio jurídico en el que está asociado a Gustavo Ciampa.
Recalde fue el principal asesor legal del camionero Hugo Moyano en los años de crecimiento de su poder en el mundo sindical. Néstor Kirchner lo incluyó en 2005 en la lista de diputados nacionales de la provincia de Buenos Aires por el Frente para la Victoria que enfrentó la disidencia del duhaldismo. Con su llegada al Congreso se convirtió en una pieza clave del kirchnerismo, con juego en los temas laborales y también judiciales. De hecho, al momento de su muerte era integrante del Consejo de la Magistratura (ahora en representación de la abogacía). Tan cercano fue de Hugo Moyano, que el jefe camionero le pidió a Cristina Kirchner que lo eliga como su compañero de fórmula en 2011, cuando compitió por su reelección. “Es necesario que un trabajador llegue a la Casa Rosada”, presionó Moyano a Cristina Kirchner en un multitudinario acto en River.
Su fidelidad a los Kirchner se mantuvo en los momentos en que Moyano rompió con la administración de Cristina, a partir de 2012. Para entonces, su hijo Mariano ya era una figura central de La Cámpora, la organización juvenil que fundó junto con Máximo Kirchner y que lo llevó a ser directivo de Aerolíneas Argentinas. Fue senador nacional y una de las espadas legislativas y judiciales de Cristina Kirchner.
Recalde estaba internado en el Hospital Alemán con un cuadro renal complejo, que se agudizó en las últimas tres semanas, en las que también tuvo neumonía, según precisaron fuentes sindicales a LA NACION. Se mantenía como asesor de decenas de gremios, entre ellos, la Asociación Bancaria, que lidera el diputado nacional kirchnerista Sergio Palazzo.
Activo y en postura militante, participó el mes pasado de una movilizavión convocada por el sindicalismo combativo para rechazar los despidos en la administración pública nacional. El 22 de noviembre último, en redes sociales, rechazó el ajuste de la gestión de Javier Milei a la salud. “Mi total y absoluta solidaridad con los trabajadores y trabajadoras del Hospital Garrahan en conflicto contra el vaciamiento de esa fundamental institución para nuestros niños y niñas de todo el país”, escribió en su cuenta de X, a la que apelaba frecuentemente a pesar de sus 86 años y de ser de otra generación. Siempre quiso estar aggiornado. A más de un dirigente sindical lo obligó a instalarse WhatsApp en lugar del mensaje de texto. Antes había insistido para que dejen el fax y le den el paso al e-mail.
Durante el gobierno de Fernando De la Rúa, Recalde patrocinó la denuncia por los sobornos en el Senado de la Nación al votarse la ley 25.250 de reforma laboral, conocida como Ley Banelco. Fue el impulsor de la demanda judicial que hicieron los sindicatos de manera colectiva, con Moyano y Julio Piumato como referentes de la acusación. Luego, junto con su hijo Mariano, apeló a una cámara oculta para denunciar irregularidades con los ticket canasta. A partir de esta intervención, logró que en 2007 este mecanismo de pago sea prohibido por ley.
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