Diciembre de 2022, casi enero. Nadie lo sabía. Lewis Hamilton estaba en Argentina. Lo anunció él mismo, en su red social favorita. Una foto ante la Facultad de Derecho, bastante oculto entre su ropa de corredor –de corredor a pie–. Otra ahí nomás, en la Floralis Generica. Una más, en los bosques de Palermo. “Primera vez en Argentina, qué hermoso lugar”, se complació, con una banderita albiceleste como ilustración. Historia de Instagram de ésas que se evaporan, que ya no es posible encontrar. Pero en su momento la vio un chico local, que pasaba más tiempo fuera de su país que en él.
Un chico de 19 años, Franco Colapinto. Colega al fin, pero ilustre desconocido. Le contestó por otra red, Twitter (todavía no X). “¡Bienvenido a Argentina, Lewis Hamilton!”, lo saludó, con un icono de mano en movimiento y dos banderas nacionales. “Avisame si necesitás una guía de turismo, ¡estaría contento de mostrarte Buenos Aires!”, le propuso, con un emoticón de risa, las etiquetas “#VisitArgentina”, “#Argentina” y “#Buenos Aires” y una réplica de la historia de Instagram del británico.
Welcome to Argentina @LewisHamilton!👋🇦🇷🇦🇷
Hit me up if you need a tour guide, I’d happily show you around in Buenos Aires! 😁#VisitArgentina #Argentina #BuenosAires pic.twitter.com/PB8jOjEafr
— Franco Colapinto (@FranColapinto) December 30, 2022
En esa época, la campaña #VisitArgentina era patrocinadora del piloto de Pilar . Y el siete veces campeón mundial le hizo honor: estuvo dos días en la capital antes de, supuestamente, abordar un crucero que lo tuvo en Tierra del Fuego para pasar año nuevo con amigos en la mismísima Antártida. Meses después, en ocasión del Gran Premio de Bahréin de 2023, contó lo bien que la había pasado en Buenos Aires: “Fue hermoso. Estuve allí dos días. Anduve corriendo por la ciudad, por una avenida que no sé cómo se llama [Figueroa Alcorta]. Pasé por un parque hermoso con lagos. Fue realmente muy lindo. No puedo esperar a volver”, comentó a ESPN.
El tuit del David al Goliat del automovilismo le gustó a mucha gusta gente, unos 6200 usuarios, pero entre las 75 respuestas no había una de Hamilton, a pesar de que el crack había sido arrobado. El inglés, ya siete veces campeón, era una suerte de ídolo de Colapinto, pero la diferencia de fama era enorme: el argentino acababa de completar su temporada de estreno en el Campeonato Mundial de Fórmula 3, en el noveno puesto. Su referido ya tenía las siete coronas, el récord de victorias y una masa inmensa de simpatizantes en el planeta.
Lewis Hamilton en Antártida
Pasó el tiempo. Franco hizo saltos inesperados. A fines de 2023 pasó de golpe de Fórmula 3 a Fórmula 2 para participar en la última carrera de ésta (Abu Dhabi). Y en 2024 participó en F. 2 sin completar el torneo: Williams lo llamó de urgencia para promocionarlo a la Fórmula 1. En menos de un año (septiembre de 2023 a agosto de 2024) Colapinto subió dos categorías. Y se hizo conocido, en Argentina y en el mundo. Pero aquel tuit quedó ahí.
En el primer gran premio, Italia, pudo cruzarse con Hamilton en el paddock. En el segundo gran premio, Azerbaiyán, se cruzó con Lewis, pero en la pista: Franco resistió la presión del inglés en Bakú y consiguió un octavo puesto con su Williams, dejando noveno al piloto de Mercedes. El multicampeón lo encomió después de la carrera, pero seguía sin conocerlo bien: olvidó su apellido. “Es realmente genial ver a jóvenes talentosos manejar tan bien. Oliver [Bearman, de Haas] hizo un gran trabajo, correr contra él [terminó décimo] fue duro pero justo. Y, ehhh… no recuerdo el nombre de este chico, eh… de Williams”. “Colapinto”, lo ayudó un periodista. “Colapinto, sí. Hizo un gran trabajo”, soltó el hepta, antes de felicitarlo en Instagram con una foto de un saludo entre ambos.
Y el chico Colapinto, de Williams, siguió haciendo grandes trabajos, en Singapur, en Austin, en Ciudad de México. Hasta que en los prolegómenos del Gran Premio de San Pablo, este jueves, recibió un halago más grande, definitivo, del piloto al que admira. Parece que empieza a ser mutua esa admiración: “Ha hecho un trabajo increíble, creo que merece estar aquí. Cuando te llaman a última hora y te lanzan a este deporte, la mayoría de nosotros tiene poca práctica. Kimi [Antonelli, joven piloto de reserva de Mercedes y titular en 2025] tiene muchos días de prueba antes de su primera carrera. Creo que Antonelli tendrá más de 20 días, o algo así, en el coche, algo que no tiene precedentes. Y les juro que este chico de aquí no tenía eso”, aludió Hamilton a Colapinto, sentado al lado en una conferencia de prensa en Interlagos, ambos junto a Lance Stroll.
El elogio de Hamilton a Colapinto
Franco rio, pero estaba en esa incómoda situación de ser halagado en persona y ante terceros. La prensa mundial, nada menos. Movió la mirada, movió las manos. Al borde del sonrojo. “Así que saltó directamente e hizo un trabajo fantástico. Fue realmente genial”, completó el piloto más exitoso de la historia de la Fórmula 1 sobre el chico que está empezando, que va por su sexta fecha. El mismo que hace menos de dos años lo invitó públicamente a mostrarle Buenos Aires y no recibió la contestación.