Publicado: junio 3, 2025, 7:08 pm
Apenas unos días después de finalizar su labor como asesor en el Gobierno de Estados Unidos, el magnate Elon Musk ha cargado duramente en sus redes sociales contra la ley fiscal y presupuestaria que el presidente Donald Trump y el Partido Republicano aprobaron en la Cámara de Representantes.
Musk, que ya aseguró sentirse «decepcionado» con el proyecto —bautizado por Trump como «gran y hermoso proyecto de ley»— ha ido más allá en un post en su red social, X: «Ya no lo soporto más, este proyecto de ley presupuestario es una abominación repugnante, escandalosa y llena de gastos superfluos. Los que votaron a favor deben sentir vergüenza, porque saben que han hecho mal».
En otro post, Musk ha asegurado que el megaproyecto fiscal de Trump «aumentará masivamente el ya gigantesco déficit de EEUU hasta los 2,5 billones de dólares, cargando a los estadounidenses con una deuda aplastantemente insostenible». En respuesta a otro post, Musk sentenciaba: «El Congreso llevará a Estados Unidos a la bancarrota».
En su rueda de prensa diaria, la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, trató de minimizar el impacto de sus declaraciones y aclarar la posición de Trump respecto a la norma: «El presidente sabe la postura de Elon Musk sobre este proyecto de ley. Esto no cambia su opinión. La opinión del presidente es que este es un proyecto de ley grande y hermoso, y lo respalda».
Rebajas fiscales y más fondos para la frontera
El megaproyecto fiscal y presupuestario de Trump busca extender y ampliar las exenciones fiscales que el republicano estableció durante su primer mandato (2017-2021) y añade nuevas rebajas fiscales, junto a un incremento en los fondos para la gestión de la frontera y la aplicación de la dura política migratoria del presidente. Esto se compensaría en parte con recortes a programas de seguridad social y ayudas.
La aprobación por estrecho margen de la propuesta significó una victoria para los republicanos en la Cámara de Representantes, a pesar de varias voces disidentes dentro del partido que buscaban profundizar en los recortes al gasto y agilizar su entrada en vigor. Ahora, se enfrenta a una ardua batalla en el Senado en busca del voto final.
Musk, que se mantuvo muy cercano al presidente antes y después de la investidura del republicano en el enero pasado, estuvo al frente del controvertido Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), encargado de impulsar recortes drásticos en el gasto público a través de recortes en programas sociales, despidos de trabajadores sociales y reducción de la operatividad gubernamental en materia social.