El misterio detrás del impactante vestido azul Klein que usó Máxima para convertirse en reina hace 12 años - Argentina
Registro  /  Login

Otro sitio más de Gerente.com


El misterio detrás del impactante vestido azul Klein que usó Máxima para convertirse en reina hace 12 años

Publicado: abril 30, 2025, 2:08 pm

Hace 12 años, la reina Beatriz comunicó públicamente su decisión de abdicar al trono de los Países Bajos después de casi 33 años. No fue una acción que pasó inadvertida en la historia de las monarquías, puesto que suele ser la excepción y no la regla. El mando pasó a manos de su hijo mayor, Guillermo Alejandro, quien asumió como rey el 30 de abril de 2013 y dio inicio a una nueva era para la corona neerlandesa. No lo hizo solo, sino acompañado por su esposa, la argentina Máxima Zorreguieta. Si se lo compara con otros traspasos, como el del rey Carlos III por ejemplo, este fue mucho más conservador y sencillo. Una de las cosas más comentadas de la investidura fue el vestido de la nueva reina consorte. Había mucha incertidumbre respecto a qué elegiría para el día más importante de su experiencia en la realeza y, cuando el misterio se develó, el mundo se encontró con una pieza que se volvió un ícono.

El 28 de enero de 2013, la reina Beatriz anunció de manera discreta y sin bombos ni platillos que abdicaría al trono de los Países Bajos en favor de su hijo mayor. Si bien su decisión llamó la atención, no fue del todo inesperada, puesto que un año antes la monarca -que en ese momento tenía 75 años- atravesó una tragedia que marcó un antes y un después en su vida y en la historia de su reinado. El 17 de febrero de 2012, su segundo hijo, Friso, sufrió un accidente mientras esquiaba en Austria. Fue sepultado por un alud y permaneció un año en coma, hasta su muerte el 12 de agosto de 2013, a los 44 años. Además, previamente tuvo que atravesar la pérdida de quién fue su marido durante 36 años, el príncipe Claus, que falleció en 2002, y la de sus padres, los príncipes Juliana y Bernardo, en marzo y diciembre de 2004 respectivamente. Además, debió enfrentar una de las peores crisis del país: un atentado contra la familia real que tuvo lugar el 30 de abril de 2009 y en el que hubo siete víctimas fatales.

Tras la abdicación de la reina Beatriz, Guillermo Alejandro y Máxima Zorreguieta asumieron como rey y reina consorte de los Países Bajos (Foto: Instagram @queen.maxima)

Fue así como durante la mañana del 30 de abril de 2013, tras cumplir exactamente 33 años como reina, y durante una ceremonia que se realizó en la Sala de Moisés del Palacio Real de Ámsterdam, Beatriz le cedió el trono a su primogénito. La investidura, la cual a diferencia de una coronación no tiene un carácter religioso, sino más bien secular, se realizó ese mismo día en la Nueva Iglesia de Ámsterdam. Uno de los mayores misterios de la jornada giraba en torno a un detalle fashionista: la vestimenta que iba a usar la nueva reina consorte. Fue un secreto guardado bajo siete llaves y ni siquiera se sabía si iba a usar un diseño de una firma local o no. Según BBC, el único dato era que sería un vestido largo y sin velo.

El vestido azul Klein de Máxima Zorreguieta, un ícono de la historia de la corona neerlandesa

Si hay algo que siempre genera interés entre los seguidores de la realeza son los looks de las figuras femeninas. Ciertas piezas pasaron a convertirse en íconos de la moda, como el “vestido de la venganza” de Lady Di o el de novia inspirado en Grace Kelly que usó Kate Middleton para su casamiento con el príncipe William.

En sus 11 años como princesa de los Países Bajos, Máxima demostró que era toda una fashionista. En el día de su boda usó un diseño de Valentino con una cola de cinco metros valuado en 100.000 e inspirado en el diseño que usó su suegra en el día de su propia boda. Cuando llegó la hora de convertirse en reina consorte, se lució con un vestido a la altura de las circunstancias.

Para la investidura, Máxima lució un vestido del neerlandés Jan Taminiau, quien hasta la actualidad es uno de sus diseñadores predilectos

Cuando Máxima Zorreguieta llegó a la Nueva Iglesia de Ámsterdam, donde se llevó adelante la ceremonia de investidura, las especulaciones llegaron a su fin y el misterio se resolvió. La argentina apareció con un espectacular vestido del diseñador neerlandés Jan Taminiau, dueño de la firma Jantaminiau (su nombre completo sin espacios), quien hasta la actualidad es uno de sus modistos de confianza y el encargado de vestirla, sobre todo para los eventos de gala.

El vestido azul klein tenía transparencias y un bordado de piedras; por encima llevó una capa larga en el mismo color

Se trató de un diseño en azul Klein -un color creado por el artista francés Yves Klein- de manga larga con un bordado de transparencia y pedrería en el torso, puños y también en la parte inferior de la falda, con un cinturón para definir la silueta. Lo que le dio el toque distintivo fue el abrigo: una capa larga hasta el piso, con hombreras y en el mismo color que el vestido. Usó unos zapatos altos del mismo tono y se peinó el cabello en un elegante recogido para lucir sobre la cabeza una joya ancestral.

Para la investidura, Máxima usó una tiara de diamantes y zafiros (Foto: Instagram @queen.maxima)

El día que asumió como reina de los Países Bajos, Máxima llevó una tiara de diamantes y zafiros que, según consignó Vanity Fair, fue un regalo que el rey Guillermo III -tatarabuelo del actual monarca- le hizo en 1881 a su segunda esposa, la reina Emma, y que en 2013 fue modificada para que pudiera usarla la nueva reina consorte.

Zorreguieta combinó la pieza con unos pendientes de diamantes y zafiros que en el siglo anterior fueron parte de una corona de la reina Guillermina (bisabuela de Guillermo Alejandro) y que luego la reina Juliana (su abuela) reversionó. También usó un prendedor de zafiro y brillantes en la solapa derecha de la capa.

Las princesas Alexia, Amalia y Ariane también lucieron vestidos azules con moños en el cabello (Foto: Instagram @queen.maxima)

Por su parte, las princesas Amalia, Alexia y Ariane, que en ese entonces tenían nueve, ocho y seis años, también lucieron outfits combinados con el vestido de su madre. Las niñas se pusieron vestidos azul francia, lazos azules en la cabeza y ballerinas doradas brillosas en los pies. La princesa Beatriz, que se sentó junto a sus nietas en la ceremonia, también llevó el mismo color.

Si bien aquel 30 de abril de 2013 la reina Máxima tuvo tres cambios de vestuario, sin dudas fue su vestido azul Klein con capa y brillantes el que marcó uno de los días más importantes de la historia de la corona neerlandesa y que hoy, 12 años después, es aún un ícono de la moda dentro de las realezas.

Related Articles