El Banco Central Europeo (BCE) afronta este jueves la que será su última reunión de 2024 y en la que los mercados dan por hecho que continuará con la senda bajista emprendida a mediados de año. Aunque algunas voces apuntan a que la autoridad monetaria podría pisar el acelerador, la mayoría de analistas esperan una bajada de los tipos de interés de 25 puntos básicos que dejaría la tasa de depósito en el 3%, su nivel más bajo desde marzo de 2023. El foco está puesto en el mensaje que pronuncie la presidenta del BCE, que ya en su discurso de octubre recalcó la necesidad de vigilar de cerca no solo la evolución de los precios, sino sobre todo el estancamiento económico en el que está sumido la eurozona y que ensombrece especialmente el horizonte de Alemania y Francia, dos de los grandes motores del Viejo Continente.
De confirmarse las previsiones, el Consejo de Gobierno del BCE acometerá este jueves la que será la tercera bajada consecutiva de los tipos de interés tras los recortes de septiembre y octubre. Se trataría de la cuarta rebaja en lo que va de año después de que la autoridad monetaria cambiara el rumbo de la política monetaria en junio, dos años después de iniciar las subidas para tratar de contener los precios. La reunión de este jueves llega en un momento en el que la inflación repuntó tres décimas en noviembre hasta el 2,3%, aunque el alza entraba dentro de las previsiones de la autoridad monetaria y los precios se mantiene todavía cerca del objetivo del 2%. Por su parte, el PIB de la eurozona avanzó en el tercer trimestre apenas un 0,4%.
«Hasta hace prácticamente nada, el consenso de mercado daba por hecho una bajada de 25 puntos básicos, pero la debilidad en los datos de PMI que hemos conocido a lo largo de los últimos días han llevado a que surjan voces que abren la puerta a una reducción de 50 puntos», apunta Cristina Gavín, jefa de Renta Fija y gestora de fondos de Ibercaja Gestión, sobre las expectativas en torno a la cita de este jueves. «Nosotros creemos que la coyuntura general no justifica esa bajada, y que el BCE preferirá ser prudente y acometer tan solo una reducción de 25 puntos en los tipos», añade, apostando por que la autoridad monetaria imite los movimientos realizados en junio, septiembre y octubre.
El director de Hipotecas de iAhorro, Simone Colombelli, coincide en vaticinar una bajada gradual, que llevaría la tasa las operaciones principales de financiación y la facilidad de crédito al 3,15% y el 3,4% respectivamente. «La lógica nos dice, sobre todo después de lo que hemos vivido en los últimos años, que Christine Lagarde no va a arriesgarse a que la inflación vuelva a dispararse en un momento en el que la incertidumbre política, y por tanto también económica, está en su máximo esplendor, sobre todo tras la victoria de Donald Trump en Estados Unidos y la moción de censura contra Michel Barnier en Francia», opina el analista, que advierte de que un nuevo recorte en los tipos de interés es una «mala noticia» para los ahorradores pero «buena» para los hipotecados.
Hipotecas más baratas
«Al reducirse los tipos de interés, quienes tengan su dinero invertido en productos de renta fija como los depósitos o las cuentas remuneradas experimentarían un descenso en sus rendimientos», explica Colombelli. En la otra cara de la moneda, la rebaja de los intereses rebajará la deuda de aquellos que tengan préstamos concedidos, como es el caso de los hipotecados con créditos a tipo variable. «Al reducirse los tipos de interés oficiales, el euríbor también caerá y quienes tengan una hipoteca variable pagarán menos intereses por ella cuando les toque hacer la próxima revisión. Igualmente, quien esté pensando en pedir una hipoteca podrá optar a productos mucho más baratos», añade el director de Hipotecas de iAhorro.
Alentado por los recortes acometidos por el BCE, el euríbor a un año, que es la referencia para la mayoría de hipotecas a tipo variable en España, encadena ocho meses de bajadas consecutivas. En noviembre, la media se situó en el 2,51%, su nivel más bajo en dos años. Desde la consultora HelpMyCash apuntan a que el indicador continuará a la baja y podría oscilar entre el 2% y el 2,25% durante el primer semestre de 2025. «Un descenso del euríbor al 2% podría traducirse en un ahorro para una hipoteca media de entre 30 y 130 euros mensuales, dependiendo de si la revisión es semestral o anual», explica la economista Olivia Feldman, cofundadora de HelpMyCash, que agrega que también las hipotecas fijas verán ajustes por la competencia entre entidades financieras y las ofertas podrían estabilizarse entre el 2% y 2,25%.
2025 en el horizonte
Más allá de la reunión de este jueves, los mercados aguardas cuál será la evolución de la política monetaria en 2025. «El BCE podría situar su tipo de referencia cerca del 2% en 2025, frente al 3,25% actual», vaticina Feldman. La primera de las ocho reuniones que la autoridad monetaria celebrará el próximo año tendrá lugar el 30 de enero. «Esa fecha será clave para ver cómo han afectado a la inflación las Navidades, una época en la que el consumo en los hogares se dispara. En caso de seguir la senda actual, es decir, bajo control, seguramente Lagarde y su equipo continúen recortando los tipos, lo que podría hacer que alcancen niveles del 2,5% durante el primer trimestre del año. Así, el 2025 podría terminar con los tipos de interés oficiales incluso por debajo del tipo de interés neutral del 2%, aunque todavía queda mucho y hay que ser cautos con las previsiones», opina Colombelli.
La incógnita está sobre todo en cuál será el ritmo de bajada de los tipos el próximo año, también con la toma de posesión de Donald Trump como factor clave. «Desde la victoria de Trump, el mercado ha dado por hecho que el BCE va a acelerar su proceso de bajadas en el tipo de intervención para tratar de amortiguar los efectos negativos que las medidas del nuevo presidente norteamericano puedan tener sobre una economía europea cuyo crecimiento está lejos de ser todo lo fuerte que sería deseable», apunta la jefa de Renta Fija y gestora de fondos de Ibercaja.