Llegó a su fin la investigación del Atlético de Madrid por los incidentes del derbi ante el Real Madrid: un total de nueve socios han sido expulsados de manera permanente «por actos tipificados en la normativa interna del club como muy graves», ha explicado en un comunicado.
«Durante este mes, nuestro departamento de Seguridad ha trabajado en la identificación de los implicados en estos hechos revisando todos los materiales audiovisuales a su disposición y en colaboración con la Policía, finalizando este proceso con la apertura de expediente de expulsión permanente de nueve socios por actos tipificados en la normativa interna del club como muy graves», informa el club rojiblanco.
El Atlético «también incluyó en su normativa interna la prohibición de utilizar en el interior del estadio cualquier elemento o prenda que impida distinguir el rostro de una persona con el fin de ocultar su identidad».
«Además, el club tomó la medida preventiva de no vender entradas para los partidos a domicilio en Sevilla, Vic, París, Palma de Mallorca y Praga a los socios abonados ubicados en la grada de animación mientras continuaba abierta la investigación», repasa.
El club también ha reiterado su «condena más enérgica de cualquier expresión de violencia» y su «compromiso de luchar contra este tipo de actitudes que no tienen cabida en el fútbol, no representan el sentir general de nuestra afición y manchan la imagen del Atlético de Madrid».
El Atlético inició la investigación a causa del «lanzamiento de objetos desde una parte de la grada baja del Fondo Sur» del estadio Metropolitano a Thibaut Courtois durante el encuentro de Liga frente al Real Madrid, que supuso el cierre parcial del campo (en el sector bajo del fondo sur) en el duelo contra el Leganés, tras la reducción de tres a un choque de sanción por parte del Comité de Apelación de la RFEF, al estimar el recurso presentado por el club.
«De forma paralela, la Comisión Antiviolencia propuso una sanción de cierre completo del estadio por dos semanas y una multa económica de 65.000 euros», indica.
A la vez, «en esos mismos días», según recoge el club, «un pequeño grupo de aficionados realizaron unos gestos en el estadio Da Luz de Lisboa que el Comité de Apelación de la UEFA consideró como comportamientos racistas y discriminatorios«.
«Por este motivo, nos sancionó con la prohibición de vender entradas a domicilio para un partido de la Liga de Campeones, aunque condicionado a que no se repitan ese tipo de comportamientos durante el próximo año, además de una multa de 30.000 euros», recuerda.
En el comunicado de este viernes, el Atlético también anuncia que, «una vez concluido este proceso de identificación de los implicados con la expulsión permanente de 9 socios, la venta de entradas para los partidos a domicilio para los socios abonados ubicados en la grada de animación se retoma con normalidad para el desplazamiento a Valladolid».
«Se abre la solicitud para todos los socios (abonados y no abonados), en las mismas condiciones habituales (todas las entradas son nominativas e intransferibles pudiendo ser usadas solo por el socio titular) y con el mismo criterio de asignación (prioridad por antigüedad de socio o antigüedad media del grupo en caso de grupos de hasta 6 socios)», añade.
«Además, con el fin de facilitar a nuestros socios la organización de su viaje y que puedan hacer reservas de hoteles o viajes en cuanto se les haya confirmado su entrada, a partir de ahora en todos los partidos fuera de casa se cerrará el periodo de admisión de solicitudes a las 24 horas de confirmarse el horario del partido e inmediatamente después, en las siguientes 48 horas, se asignarán las entradas y se deberá hacer el pago de las mismas», informa.