Publicado: octubre 23, 2025, 12:14 pm
El Gobierno de EEUU ha rechazado categóricamente la iniciativa impulsada por el parlamento israelí (Knéset) para anexionar zonas ocupadas de Cisjordania y ha dejado claro que no la apoyará. «Esto no sucederá«, ha repetido hasta tres veces el presidente estadounidense, Donald Trump, en una entrevista con la revista Time publicada este jueves. El mandatario ha asegurado que Israel no va a apropiarse del territorio palestino y ha advertido de que «perdería el apoyo» de EEUU si tomase esta decisión.
«No va a suceder porque he dado mi palabra a los países árabes y no es algo que pueda hacerse ahora, tenemos un gran apoyo de estos países. Israel perdería el apoyo de EEUU si esto sucede», ha aclarado. Trump ha adelantado también que quiere visitar Gaza «pronto» y que prevé un relanzamiento de los lazos de Israel con el mundo árabe. «Bibi, no puedes luchar contra el mundo. Puedes librar batallas individuales, pero el mundo está en tu contra», ha dicho Trump al recordar sus palabras para convencer al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de que respaldara el plan de paz.
Por su parte, el vicepresidente de EEUU, JD Vance, también ha reiterado este jueves que «Cisjordania no va a ser anexionada por Israel». «Es una maniobra política estúpida, y personalmente me siento insultado. Cisjordania no va a ser anexionada por Israel, la política de la Administración Trump es que Cisjordania no va a ser anexionada por Israel y va a seguir siendo así», ha dicho Vance a los periodistas antes de subirse a un avión en el aeropuerto Ben Gurión de Tel Aviv. «Si quieren hacer votos simbólicos, pueden hacerlo, pero nosotros definitivamente no estamos felices con ello», ha recalcado.
En la misma línea se ha expresado el secretario de Estado, Marco Rubio, quien ha considerado que la iniciativa del parlamento israelí supone una «amenaza» para el plan de paz impulsado por Trump en la Franja de Gaza. «Eso no es algo que podamos apoyar en este momento», ha señalado Rubio, que este miércoles puso rumbo a Israel para afianzar el alto el fuego. «Es una votación en la Knéset, pero obviamente creo que el presidente ha dejado claro que no es algo que apoyaríamos en este momento, y creemos que es potencialmente una amenaza para el acuerdo de paz», ha indicado.
La Knéset da el primer paso de anexión
El Parlamento israelí aprobó este miércoles, con 25 votos a favor y 24 en contra, una propuesta para anexionar la Cisjordania ocupada, en el primer paso que precede a otras tres votaciones que serán necesarias en la Knéset para convertir este proyecto en ley. La propuesta, que también ha sido rechazada por España, Catar, Turquía y otros países, dice que «el Estado de Israel aplicará sus leyes y soberanía a las zonas de asentamiento en Judea y Samaria, para establecer el estatus de estas áreas como parte inseparable del Estado soberano de Israel».
Todos los diputados del Likud, el partido de Netanyahu, votaron en contra, excepto de uno, Yuli Edelstein, que rompió la disciplina de la formación y decantó el resultado a favor de la medida. Por ello, el partido le retiró de su posición en el Comité de Defensa y Asuntos Exteriores de la Knéset en respuesta, según el diario The Times of Israel.
En este sentido, Netanyahu ha asegurado que esta primera aprobación fue «una provocación deliberada» de la oposición para crear discordia durante la visita de Vance a Israel. «La votación de la Knéset (Parlamento) sobre la anexión fue una provocación política deliberada por parte de la oposición para sembrar discordia durante la visita», recoge un comunicado de la oficina de Netanyahu, que añade que ese proyecto de ley y otro «fueron patrocinados por miembros de la oposición».
En septiembre, el ministro de Finanzas israelí y miembro clave de la coalición de Gobierno, Bezalel Smotrich, presentó un plan para que Israel se anexione el 82% de Cisjordania, en respuesta a la oleada de reconocimientos al Estado de Palestina que se estaba produciendo. Días antes, el Ejecutivo había aprobado un plan para expandir el asentamiento ilegal de Maale Adumim con la construcción de miles de viviendas sobre territorio palestino. «Hablarán de un sueño palestino, nosotros seguiremos construyendo una realidad judía», dijo entonces Smotrich. En la firma junto al alcalde de Maale Adumim del acuerdo marco para dicha expansión, Netanyahu sentenció: «Esta tierra es nuestra».
