Publicado: noviembre 24, 2025, 6:16 pm
La Fundación Humanitaria de Gaza (GHF, por sus siglas en inglés), la organización de ayuda humanitaria respaldada por Israel y Estados Unidos para actuar en la Franja, ha anunciado este lunes que ha puesto fin a sus operaciones en el enclave palestino, en el marco del alto el fuego actual en la zona. Desde el inicio de su actividad, la GHF ha estado envuelta en polémica por la muerte de centenares de personas cuando intentaban obtener comida en sus puntos de reparto, lo que supuso la denuncia de diferentes entidades humanitarias.
Así, la organización ha informado de la «conclusión exitosa de su misión de emergencia en Gaza después de entregar más de 187 millones de comidas gratuitas directamente a los civiles que viven en Gaza, una operación humanitaria récord que garantizó que la ayuda alimentaria llegara a las familias palestinas de manera segura y sin desviarse a Hamás u otras entidades», reza un comunicado publicado en su página web.
El director ejecutivo de GHF, John Acree, ha defendido que su objetivo «desde el principio» era «satisfacer una necesidad urgente, demostrar que un nuevo enfoque podía tener éxito donde otros habían fracasado y, en última instancia, transferir ese éxito a la comunidad internacional en general». De hecho, ha subrayado que construyeron «un nuevo modelo desde cero» después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, pidiera que la ayuda llegara directamente a la población civil.
«En un momento crítico, nos enorgullece haber sido la única operación de ayuda que proporcionó comidas gratuitas de forma fiable y segura directamente a la población palestina de Gaza, a gran escala y sin desvíos. Desde nuestro primer día de operaciones, nuestra misión fue única: alimentar a la población civil con necesidades urgentes. Construimos un nuevo modelo que funcionó, salvó vidas y devolvió la dignidad a la población civil de Gaza», ha expresado, haciendo así una crítica velada a las agencias de la ONU.
En este sentido, ha destacado que ha distribuido, además de los 187 millones de comidas, 1,1 millones de paquetes de alimentos complementarios listos para consumir para niños desnutridos y que había establecido vías de distribución que priorizaban a los sectores vulnerables de la sociedad: mujeres, niños y ancianos. Todo ello bajo un equipo estadounidense de profesionales humanitarios y exmilitares, así como trabajadores locales.
Además, ha asegurado que su objetivo era abrir más puntos de distribución de ayuda y ha criticado que el resto de organizaciones de ayuda «tradicionales» se negaran a colaborar con ellos. Por último, ha asegurado que no se disolverá como ONG registrada y que se mantendrán preparados para reorganizarse si se identifican nuevas necesidades humanitarias.
Estados Unidos aplaude la labor de la GHF
Desde Washington, el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Thomas Pigott, ha asegurado a través de un mensaje publicado en su perfil de la red social X que el modelo de GHF durante sus cuatro meses y medio de operaciones fue «fundamental» para que Hamás accediera a alcanzar un alto el fuego en el enclave palestino.
«GHF ha compartido valiosas lecciones aprendidas con nosotros y nuestros socios. El modelo de GHF, en el que Hamás ya no podía saquear ni lucrarse robando ayuda, fue fundamental para que se sentara a la mesa de negociaciones y lograra un alto el fuego. Les agradecemos lo que brindaron a los gazatíes», ha manifestado.
Hamás exige que la GHF rinda cuentas por las víctimas en sus puntos
Por su parte, el portavoz de Hamás, Hazem Qasem, ha pedido a la comunidad internacional que garantice que dicha organización rinda cuentas por los tiroteos que tuvieron lugar en sus puntos de reparto y alrededores, y que dejaron miles de víctimas entre muertos y heridos.
«Con el anuncio de la llamada Fundación Humanitaria de Gaza de que está poniendo fin a su trabajo en la Franja de Gaza, hacemos un llamamiento a todas las organizaciones internacionales de Derechos Humanos para que no le permitan eludir su rendición de cuentas», ha declarado.
Qasem ha dicho que GHF «causó el martirio y lesiones a miles de personas» en el enclave y, además, «encubrió la política de hambruna practicada por el Gobierno de ocupación», según recoge el diario ‘Filastín’, vinculado al grupo.
