Publicado: septiembre 6, 2025, 5:40 pm
Médicos chinos han extraído del glúteo de una mujer china un trozo de termómetro de vidrio que la mujer llevaba clavado durante más de 20 años tras un accidente escolar.
Tal y como recoge el Mirror, hace 22 años, cuando todavía era una joven alumna de primaria, la paciente, identificada como señora Hu, se sentó accidentalmente sobre un termómetro y requirió atención médica urgente.
«Estaba sentada en mi escritorio cuando un compañero me pidió prestado mi goma de borrar. Se me cayó al suelo y fui a buscarla. Mi compañero también lo buscó debajo del escritorio, pero casualmente tenía un termómetro en la mano, que estaba sobre mi silla. Lo encontré antes que él, así que fui a sentarme. El termómetro se me quedó atascado en la nalga izquierda«, explica la mujer.
En aquel momento, los médicos atendieron a la entonces chica. Tras ser trasladada de urgencia al hospital, los médicos intentaron extraer el objeto extraño del glúteo: «Cuando me lo quitaron, era mucho más corto. Empecé a llorar y dije que no debería ser así».
«Me hicieron otra radiografía, pero esta vez no se vio nada porque el cristal era transparente; supongo que no se vio en la tomografía en ese momento», explica la paciente.
Durante las dos décadas siguientes, la señora Hu, oriunda de la ciudad de Wuhan, siguió con su vida con un trozo de termómetro roto de dos centímetros alojado en su glúteo.
Entonces, el mes pasado, un incidente no relacionado finalmente reveló la verdad. Tras sufrir una lesión mientras montaba en bicicleta, Hu se temió haber sufrido una fractura sacra.
Después de someterse a un ecografía 3D, los médicos encontraron el trozo de termómetro y se lo extrajeron.
El doctor Shang Ranran, médico de cabecera del Hospital número 1 de Wuhan, declaró: «Medía unos 2 centímetros de largo. Fue una suerte que no hubiera mercurio en su interior. De ser así, podría haberle causado intoxicación por mercurio y otras afecciones muy peligrosas».
