Publicado: agosto 16, 2025, 6:07 pm
En la Argentina, los chicos de primaria crecen entre pantallas. En vísperas del Día del Niño, que se celebra este domingo, el último informe de Argentinos por la Educación, elaborado a partir de los cuestionarios complementarios de las pruebas Aprender 2023 y 2024, muestra que las redes sociales, el consumo audiovisual y los videojuegos ocupan un lugar central en su tiempo libre.
Según el informe, el 89% de los estudiantes de sexto grado usa redes sociales y el 87% ve series o películas; el 68% juega de forma digital y el 40% crea contenidos para redes.
Uno de los datos más preocupantes es la caída sostenida de la lectura de libros no escolares: entre los estudiantes de sexto grado, pasó del 61% en 2018 al 46% en 2023. También es bajo el interés por estudiar idiomas fuera de la escuela: apenas un 35% lo hace, frente al 37% en 2018.
La presidenta de la Asociación Civil Educación para Todos, Irene Kit, advirtió: “Los estudiantes de 3º a 6º grados tienen entre 8 y 11 años, una edad especialmente potente para la interacción social, la inclusión en actividades de equipo y la identificación de habilidades y gustos personales en los cuales desarrollar maestría. El incremento del acceso a contenidos y recursos digitales en la infancia se vive como un hecho ineludible, y a veces con una valoración de época”.
Subrayó que un acceso temprano y sin supervisión a contenidos digitales puede ser riesgoso para el desarrollo integral: “Pocas veces ese acceso se alcanza a corresponder con una adecuada supervisión parental, aun cuando a edades cada vez más tempranas se accede a esos recursos, tan potentes como riesgosos para el desarrollo y la salud integral de los niños y niñas”.
La tendencia se repite entre los más chicos: en 3° grado, el 91% mira dibujos animados, series o películas; el 79% consume videos en TikTok o en YouTube y reels en Instagram y el mismo porcentaje juega videojuegos.
Para Inés Zerboni, directora de Proyecto E y licenciada en psicopedagogía, “el tiempo libre de los niños es mucho más que un momento para descansar: es un espacio clave para su desarrollo emocional, social y creativo. El informe muestra que hoy, la mayor parte de los alumnos lo ocupa frente a una pantalla”.
El desafío, coinciden los especialistas, es lograr un equilibrio. La tecnología forma parte inevitable de la infancia, pero la escuela, las familias y la comunidad tienen un rol clave en ofrecer alternativas que enriquezcan a los chicos: deportes, arte, juego al aire libre y tiempo compartido. El objetivo no es eliminar las pantallas, sino evitar que ocupen todo el escenario.
“La tecnología es parte del mundo actual, pero su uso excesivo limita experiencias esenciales: jugar, moverse, crear y compartir. Los niños necesitan aburrirse para inventar, correr para liberar energía y estar con otros para aprender a convivir. Somos los adultos quienes debemos ofrecerles alternativas que los enriquezcan: un deporte, una actividad artística, un encuentro con amigos, un rato en contacto con la naturaleza”, explicó Zerboni.
Pese a la omnipresencia de las pantallas, actividades como el deporte, el arte y los encuentros con amigos siguen teniendo un alto nivel de participación. El 85% de los alumnos de sexto grado aseguró realizar actividades artísticas, deportivas, físicas o juegos al aire libre, y el 81% dijo reunirse con amigos. Entre los más chicos, el 80% juega al aire libre, el 79% practica deportes, el 42% lee historietas y entre el 22% y el 26% participa en clases de danza, arte o música.
Las diferencias por provincia también son marcadas. El uso de redes sociales, por ejemplo, alcanza el 93% en la ciudad de Buenos Aires, pero baja al 78% en Formosa. El promedio nacional es del 89%. La Capital Federal también lidera en el porcentaje de alumnos que juegan de manera digital (online u offline) en su tiempo libre, con un 78%, mientras que Formosa vuelve a quedar en la última posición, con 51%. El promedio nacional en este caso es del 68%.