Publicado: febrero 10, 2025, 9:13 pm
Las recientes lluvias trajeron alivio y esperanza a los productores del norte de la provincia de Buenos Aires.
Luego de semanas de incertidumbre climática, los cultivos mostraron signos de recuperación, particularmente la soja de primera, que podría recuperar buena parte de su potencial productivo.
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Darío Paoloni, gerente de la Cooperativa Agropecuaria de La Violeta, en el partido de Pergamino, destacó que el girasol volvió a ganar terreno en la región en diálogo con TN.
“En los últimos tres o cuatro años, considerando su costo de implantación y el valor de mercado, el girasol ha mostrado un crecimiento sostenido. A diferencia de otras campañas, en esta zona se han sembrado varias hectáreas, y proyectamos una producción de 2.000 toneladas. Es un cultivo que se está recuperando y vuelve a ser protagonista”, explicó.
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Además, señaló que el girasol ofrece una ventaja clave frente a otros cultivos: su menor necesidad hídrica y su rápida adaptación a las condiciones climáticas.
![Darío Paoloni, gerente de la Cooperativa Agropecuaria La Violeta. (Foto: Facebook Cooperativa La Violeta).](https://gerente.com/ar/wp-content/uploads/sites/14/2025/02/4OHJL5WY7RASLPIIJ4V5CMUKHQ.jpg)
El panorama agrícola de la región cambió con los años
En el pasado, el girasol ocupaba una superficie considerable en el norte bonaerense, pero su participación en la rotación de cultivos fue disminuyendo.
Ahora, con los costos productivos en aumento y la necesidad de diversificar opciones, los productores vuelven a considerar seriamente este cultivo, atentos a su rentabilidad y al impacto del clima en cada campaña.
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El girasol tuvo una gran expansión en el norte de la provincia de Buenos Aires durante las décadas de 1980 y 1990, cuando era un cultivo clave en la rotación agrícola de la región.
En esos años, su superficie sembrada era considerable debido a su buena adaptación a los suelos y su rentabilidad.
Sin embargo, con el tiempo, el avance de la soja y los cambios en la ecuación económica llevaron a una reducción en la siembra de girasol.
![Las recientes lluvias trajeron alivio a los productores del norte de Buenos Aires, favoreciendo la recuperación de la soja y el maíz. (Foto: TN).](https://gerente.com/ar/wp-content/uploads/sites/14/2025/02/DPH2R3KWHZCHPP4WWES6WY2YOA.jpeg)
El impacto de las lluvias
El maíz de primera sufrió el impacto de la falta de agua en su etapa crítica.
“Va a tener un promedio aproximado de 60 quintales, con picos de 80, pero la lluvia llegó tarde para ese ciclo. En cambio, al maíz de segunda le llegó a tiempo y tendrá una mejor performance. No vamos a alcanzar los rindes de Córdoba, donde serán superiores”, detalló Paoloni.
En cuanto a la soja, Paoloni sostuvo que “si se reacomoda con estas lluvias y logra rindes normales, será muy importante para los productores”.
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Además, subrayó la relevancia de continuar sembrando a pesar del contexto económico. “Hoy sembrar es muy importante porque está todo sobrevaluado con respecto al dólar”, afirmó.
El gerente de la cooperativa también valoró la decisión del Gobierno de reducir temporalmente las retenciones.
![Estiman rendimientos de 60 a 80 quintales para el maíz, gracias a las lluvias recientes. (Foto: BCCBA).](https://gerente.com/ar/wp-content/uploads/sites/14/2025/02/3VKGHB7BOZBHLKEDFLOZ7BLS2E.jpg)
“Es una muy buena señal. Se divulgaba pero no llegaba, y cuando se anunció, el productor lo tomó muy bien. Son siete puntos menos, lo que repercutió en el mercado”, destacó.
Sin embargo, advirtió sobre los costos de producción: “El problema es que todo quedó alto en dólares, y el costo de implantar un cultivo sigue siendo el tema central para el productor”.
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En relación con la carga impositiva, señaló que “si sumamos retenciones, Ganancias e Ingresos Brutos, hablamos de casi un 60% de costo impositivo. Siempre se dijo que de cada tres camiones, el productor se queda con uno. Hoy ese costo supera el 70% y es necesario reducirlo”.