Cuatro jugadoras de River permanecen detenidas en Brasil luego de haber protagonizado un escándalo en un partido ante Gremio que incluyó acusaciones de racismo. El encuentro disputado el último viernes por la noche debió ser suspendido cuando se disputaba el primer tiempo luego de una violenta pelea, gestos discriminatorios y la expulsión de seis integrantes del equipo Millonario.
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Candela Díaz, Camila Duarte, Juana Cángaro y Milagros Díaz son las jugadoras que permanecen arrestadas desde el viernes. El último sábado, la Justicia local impidió su liberación basándose “en la falta de vínculos de las deportistas con Brasil”, de acuerdo a la información publicada por el sitio Globo Esporte.
Por estas horas, integrantes del equipo legal de River se encuentran en San Pablo para intentar destrabar la situación y lograr la liberación de las futbolistas. También está trabajando en el caso la abogada brasileña Thais Sankari, que le dijo al mencionado medio local que las cuatro integrantes del plantel millonario “están asustadas por lo sucedido”.
El mismo día del escándalo en el partido, desde las cuentas oficiales del club de Núñez publicaron un fuerte comunicado. “River Plate manifiesta su más absoluto repudio ante los gestos discriminatorios ocurridos en el encuentro con Gremio por la Brasil Ladies Cup 2024. Comunica que ya está tomando las medidas disciplinarias correspondientes y seguirá trabajando para erradicar este tipo de conductas”, escribieron.
Fuentes del club ratificaron a TN que consideran “repudiables” las actitudes de las jugadoras y que tomarán medidas para sancionarlas a nivel interno. Sin embargo, también calificaron de “desmedidas” la detención y las medidas tomadas por las autoridades de Brasil.
El equipo legal del Millonario que viajó a San Pablo, además, se mantiene en contacto con las familias de las jugadoras que permanecen detenidas, mientras el resto del plantel ya volvió a Buenos Aires.
Después de la batalla campal dentro del campo de juego, varios testigos señalaron a Candela Díaz, Camila Duarte, Juana Cángaro y Milagros Díaz como responsables de los hechos. Inicialmente las jugadoras de River fueron trasladadas a la Comisaría 6 de San Pablo y posteriormente a una prisión de la misma ciudad.
Qué pasó en el partido de River ante Gremio por la Ladies Cup
Los equipos de fútbol femenino de River y Gremio protagonizaron un escándalo el viernes por la noche en la Ladies Cup que se jugó en Brasil. Las jugadoras del Millonario hicieron gestos racistas contra el plantel de Porto Alegre, lo que provocó una batalla campal y la suspensión del partido.
Después de la trifulca en el campo de juego, seis futbolistas fueron expulsadas. Todo ocurrió luego de que el equipo brasileño empatara el partido en el primer tiempo. Después del empate de María Dias, Gisele, jugadora de Gremio, festejó mostrándole el escudo a las jugadoras de River, lo que desató la furia de las argentinas.
Juana Cángaro vio la roja en el conjunto de Núñez después de haberse peleado con las brasileñas y además, las futbolistas de River increparon a un alcanzapelotas que habría insultado a las argentinas. Esta acción desencadenó una batalla campal.
Tras el enfrentamiento, la entrenadora de Gremio denunció que las jugadoras del Millonario habían hecho gestos racistas: Cándela Díaz fue captada por las cámaras cuando simulaba actuar como un mono. Por este motivo, el árbitro decidió suspender el partido.
Horas después, las autoridades de la Ladies Cup decidieron descalificar a River de la edición 2024 del torneo y suspender su participación en los próximos dos años. “La organización fortalece su posición antirracista y reafirma que nunca tolerará casos de esta naturaleza”, recalcaron.
En la final entre Gremio y Bahía que se disputó el domingo, las jugadoras salieron con pancartas que decían “No al racismo” y las capitanas pronunciaron discursos en contra de la discriminación.