El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido este martes cancelar su presencia en la cumbre del Consejo Europeo que tendrá lugar el jueves en Budapest. La agenda del jefe del Ejecutivo está centrada ahora mismo en la gestión de los estragos de la DANA y en el anuncio ha agradecido a la UE su colaboración y su comprensión. «La UE está con España», ha escrito en redes sociales.
El Gobierno ha aprobado este martes en Consejo de Ministros un primer paquete de ayudas para paliar la catástrofe causada por la DANA valorado en 10.600 millones de euros. Se trata de la primera fase de un plan estructurado en tres etapas, que cubre un total de 75 municipios (la mayoría en la Comunidad Valenciana) y que incorpora medidas inspiradas en la respuesta a la pandemia y a la erupción del volcán de La Palma.
El paquete es muy amplio e incluye ayudas de hasta 60.000 euros por vivienda dañada, 5.000 euros para autónomos y hasta 150.000 para pymes que han visto perjudicado su negocio. Los perjudicados por la catástrofe también podrán aplazar pagos de sus hipotecas o préstamos personales, se desplegarán 5.000 millones de euros en avales públicos para créditos y el Gobierno asumirá todos los gastos de emergencia en los que incurran los ayuntamientos. El plan también incluye exenciones fiscales en impuestos municipales, aplazamientos en el pago de la declaración de la renta; despliegue de ERTE y paro para los autónomos o subidas provisionales en el ingreso mínimo vital. También se ha solicitado a Bruselas la activación del Fondo Europeo de Solidaridad y el desvío de fondos de cohesión para paliar el desastre.
Esa vía del Fondo de Solidaridad permite al bloque comunitario ayudar de forma efectiva a un Estado miembro o a un país candidato a la adhesión en sus esfuerzos por hacer frente a los daños provocados por una catástrofe natural grave o una emergencia grave de salud pública. En este caso la DANA entra en el primer grupo, así que España podría solicitarlo para ayudar la recuperación de las zonas afectadas. Además, el Gobierno de la Comunidad Valenciana ya ha solicitado al Ejecutivo central más de 31.000 millones de euros.
Pero hay que entender que no es una posibilidad inmediata. «No es una opción de urgencia», reafirman desde Bruselas.Este fondo no es una herramienta para dar respuestas rápidas a emergencias o catástrofes naturales específicas. Esta es la función de la Reserva para Ayudas de Emergencia. Se trata, con todo, del principal instrumento de la Unión para apoyar la recuperación de catástrofes naturales y es una expresión de la solidaridad, tal como explican desde Bruselas. Se ha recurrido a él en situaciones como inundaciones, incendios forestales, terremotos, tormentas o sequías.