Publicado: septiembre 4, 2025, 6:02 pm
Conforme va pasando el tiempo, los teléfonos móviles como el iPhone son más resistentes y soportan mejor los golpes, pero a quien lo le ha dado un ‘micro infarto’ cuando se nos cae o se nos resbala de la mano. Puede parecer algo contradictorio, pero parece si se da un golpe desde poca altura puede dañarse más que si lo hace desde un lugar más elevado y que la pantalla termine rota por algunas partes.
Claramente, todo depende de la forma en que se caiga, si es a mayor velocidad o menos, la superficie contra la que impacte, entre otras variables, por lo que siempre hay que tener cuidado como y donde lo llevamos. Pero lo que nadie imaginaria es que un móvil pueda sobrevivir a una caída desde más de mil metros de altura. Esta historia ha sucedido en Empuriabrava, Girona.
Un iPhone sobrevive a una caída de 1.500 metros de altura
Durante una jornada de paracaidismo, uno de los saltadores perdió su teléfono en el descenso cuando se encontraba a unos 5.000 pies de altura, más o menos unos 1.500 metros sobre el suelo. Al aterrizar, comenzaron a buscarlo para intentar recuperarlo, y gracias a la función de sonido del dispositivo, lo encontraron escondido entre las hierbas de un campo cercano. Una vez que llegaron a él, vieron que el teléfono estaba intacto: «Está impecable, es increíble».
El video de lo ocurrido ha sido compartido por el influencer Pau Ramis (@pau.ramis) en su cuenta de TikTok y para sorpresa de nadie la publicación se ha hecho viral. En el post se puede ver el momento de pánico que sufre el paracaidista al perder el teléfono y como después todo cambia radialmente para bien al encontrarlo como si nada hubiera pasado. Ver para creer.
De hecho, muchos usuarios comentan con toque de humor sobre la situación haciendo referencia a cuando el móvil se cae de la cama y se rompe o que «estaba con el modo avión». Otros se mostraban más preocupados sobre lo que habría pasado si ese dispositivo cae justo en la cabeza de alguien. Pero la explicación de todo, más allá de las reglas de la física, está en la suerte, ya que si impacta sobre la roca o el asfalto, el final hubiera sido muy diferente.