Publicado: junio 10, 2025, 11:00 am
La tecnología vestible ha avanzado a pasos agigantados en los últimos años. De ser simples contadores de pasos, los relojes inteligentes han evolucionado hasta convertirse en auténticos centros de datos personales: miden tu pulso, monitorizan tu sueño, analizan tu rendimiento deportivo y te permiten recibir notificaciones sin sacar el móvil del bolsillo. Pero, como suele pasar con los dispositivos orientados a la salud y el deporte, la calidad suele ir de la mano de un precio elevado.
Sin embargo, en este mercado cada vez más competitivo, hay modelos que logran destacar por ofrecer una gran cantidad de funciones sin disparar demasiado el presupuesto. Y eso es precisamente lo que algunos corredores y usuarios activos buscan: un smartwatch preciso, duradero, que no haga falta cambiar cada año y que no exija una gran inversión inicial. Y los relojes deportivos de Garmin llevan tiempo situándose entre los favoritos del público por su fiabilidad y enfoque especializado.
Uno de los modelos más completos de su gama media es el Garmin Forerunner 255, un reloj que ha sabido equilibrar prestaciones avanzadas con un diseño ligero y compatible con el día a día. Disponible casi a mitad de precio en Amazon (y en AliExpress), este smartwatch se presenta como una alternativa muy sólida para quienes entrenan con regularidad y quieren tenerlo todo medido sin complicaciones.
Un reloj hecho para moverse (y ayudarte a hacerlo mejor)
El Forerunner 255 está pensado para quienes no solo corren de vez en cuando, sino que buscan comprender y mejorar su rendimiento. Su sistema de GPS con tecnología multibanda, por ejemplo, permite registrar rutas con mayor precisión, incluso en zonas urbanas densas o bajo árboles. Esto se traduce en datos más fiables y menos frustración a la hora de analizar un entrenamiento.
Además, el reloj ofrece perfiles de actividad muy variados, desde carrera hasta ciclismo, pasando por natación o sesiones de triatlón completas. Esta versatilidad resulta útil para quienes combinan distintos deportes o simplemente quieren tener la libertad de cambiar de disciplina sin preocuparse de si su reloj sabrá adaptarse.
Una de las funciones más útiles para el día a día es el informe matutino (Morning Report), que resume la calidad del sueño, el estado del cuerpo tras el descanso y una sugerencia de entrenamiento en función de esos datos. No es solo un añadido curioso: para quienes entrenan a menudo, esta información puede marcar la diferencia entre un día bien aprovechado y uno de sobreesfuerzo.
Lo que diferencia a un buen reloj de uno que se queda corto
A nivel de autonomía, el reloj también destaca. Puede mantenerse encendido durante hasta 14 días en modo reloj inteligente y unas 30 horas con el GPS activo, lo que facilita su uso continuo sin necesidad de cargarlo cada noche. Esto resulta especialmente útil en viajes, entrenamientos largos o simplemente en rutinas exigentes donde cargar el reloj puede ser un olvido más.
Además, se agradecen pequeños detalles como la posibilidad de pagar directamente desde la muñeca con Garmin Pay, algo especialmente útil si sales a correr sin llaves ni cartera y quieres tomar un café después del entrenamiento.
El Forerunner 255 es una opción a tener en cuenta tanto si eres corredor habitual como si estás dando los primeros pasos en el mundo del deporte con métricas. No se trata del reloj más avanzado de Garmin, pero sí de uno de los más equilibrados en cuanto a lo que ofrece frente a lo que cuesta. Es ligero, discreto, y con una interfaz clara incluso para quienes no se consideran especialmente tecnológicos.
