Publicado: febrero 11, 2025, 2:29 pm
Violencia extrema en el fútbol base francés. Un partido de categoría sub-20 disputado este domingo entre el Dammarie-les-Lys y el Meaux en el departamento galo de Seine-et-Marne fue suspendido debido a los graves incidentes que se produjeron durante el descanso del mismo. El árbitro acababa de pitar el final de la primera parte del encuentro jugado en el estadio Pierre-Guillot de Dammarie , 50 kilómetros al sur de París, cuando varios encapuchados vestidos de negro entraron en el recinto y se dirigieron a los vestuarios armados con palos y bates de béisbol. Según las primeras conclusiones de la investigación, los encapuchados acudieron a una llamada realizada por un aficionado del Dammarie-les-Lys que había tenido un conflicto previo y extradeportivo con uno o varios jugadores del Meaux. Así, los invasores se fueron directos a la caseta del Meaux. Encontraron la puerta cerrada y la oposición de los futbolistas a abrirles, así que la destrozaron a golpes . A partir de ahí se desató el caos. Los atacantes persiguieron y golpearon a varios jugadores. Entre ellos, el portero del Meaux, que tras zafarse de las agresiones se fue al vestuario, cogió un cuchillo y regresó al campo . En el vídeo se aprecia que el guardameta (vestido de amarillo chillón) se dirige a un joven y parece apuñalarle con la mano izquierda en el abdomen. El herido, de 18 años, fue trasladado urgentemente en un helicóptero al hospital de la Pitié-Salpétrière (París) . Su estado es muy grave. Tras darse cuenta de lo ocurrido, los agresores retomaron su ataque contra el portero y contra otro jugador. Ambos huyeron y, temiendo por su vida, se lanzaron al río Sena para escapar. Cuando llegó la policía varios agentes tuvieron que tirarse al agua porque uno de los dos chavales no sabe nadar y estaba ahogándose. Mientras, otros policía estaban prestando los primeros auxilios al joven que había sido apuñalado. Finalmente, realizaron varias detenciones .