Publicado: mayo 4, 2025, 8:06 am
George Simion, cabeza saliente del partido de extrema derecha AUR (Alianza para la Unidad de los Rumanos) es el favorito para ganar el liderazgo en la primera vuelta de las elecciones en RumanÃa de este 4 de mayo. Tras la prohibición para presentarse a los comicios del candidato prorruso Calin Georgescu, Simion ha catalizado la ira provocada contra la justicia rumana entre los votantes del ultranacionalista. Sin embargo, una victoria de Simion preocupa a los europeÃstas dado que hablamos de un euroescéptico seguidor del movimiento estadounidense MAGA. Es más, el candidato independiente NicuÈ™or Dan, alcalde de Bucarest, señaló que una segunda vuelta entre Simion y el ex Primer Ministro Victor Ponta, que se presenta en una plataforma soberanista, serÃa «el peor escenario» para RumanÃa. En noviembre, Simion ya presentaba las 200 medidas que pretende implementar de ser elegido. Los medios rumanos se hacÃan eco de que sus propuestas van desde la desburocratización del Estado, menores impuestos al trabajo, pero también bajas contribuciones al seguro social, al seguro de salud o al sistema de pensiones. La web de AUR detalla que es un partido patriótico, de esencia conservadora donde la persona y la nación están en el centro de sus polÃticas. Y sus pilares doctrinales básicos son: «Fe, Nación, Familia y Libertad». Consideran que RumanÃa necesita urgentemente una estrategia nacional de población , un objetivo que la AUR asume con prioridad como parte de su programa polÃtico. Esta estrategia tendrá como objetivo mejorar la situación demográfica y reducir la emigración aumentando el apoyo familiar, mediante la asistencia financiera correlacionada con las necesidades reales de una familia con hijos.  Buscan promover programas familiares para reducir los gastos familiares incentivando la actividad económica familiar y el adecuado aprovechamiento de los recursos familiares. «AsÃ, nuestro objetivo es tener en Rumania el mayor número posible de familias, tan longevas y numerosas como sea posible », indican. Consideran que hay que sacar a la administración central y local del reino de la arbitrariedad y del clientelismo, que las hacen especialmente vulnerables en el actual contexto de seguridad. Y desean reorientar la fiscalidad hacia el apoyo al espÃritu empresarial, especialmente el local. En este sentido, consideran especialmente importante elegir alcaldes y presidentes de consejos distritales en dos vueltas. Modificarán la legislación en este ámbito: la relativa a las elecciones locales, parlamentarias, al Parlamento Europeo y presidenciales, la relativa a los conflictos de intereses, asà como el Código Administrativo. Uno de sus objetivos prioritarios es que RumanÃa alcance, en 2028, la media europea en el indicador PIB/cápita . Para ello, consideran necesario aumentar el empleo en la economÃa nacional, la productividad laboral y los ingresos. Actualmente, el acceso a los alimentos en Rumania está muy por debajo del de los paÃses desarrollados. En ese sentido, d esarrollarán polÃticas industriales, comerciales, agrÃcolas, energéticas, fiscales, para combatir la pobreza –la segunda más alta de Europa. Y la desigualdad social , que ha aumentado drásticamente en los últimos 10 años, situándose muy por encima de la media europea. Apelan por desburocratizar la evaluación del sistema educativo, especialmente del universitario, y proponen que la Academia se involucre en un programa sostenido de evaluación de sus necesidades de acuerdo con las prioridades del interés público, a fin de frenar el muy nocivo fenómeno de las «fábricas de diplomas». Señalan que los rumanos numéricamente inferiores de algunos condados del paÃs se beneficiarán de un apoyo sistemático y constante, de modo que los niños de habla rumana consigan acceder a la educación preescolar y escolar en su lengua materna, con derogación del número obligatorio de niños para constituir una clase. Dicen que fomentarán el resurgimiento de escuelas étnicamente mixtas, para frenar el enclavismo étnico a través de la escuela, garantizando asà el marco de la paz social. Y sostienen que apoyarán polÃticas para desideologizar y eliminar la sexualización de la educación, asà como de la educación familiar. Consideran que el ser biológico de la nación rumana y su patrimonio genético representan una garantÃa de nuestra supervivencia en el mundo y en la eternidad. Por ello, establecen que la protección de la salud de la población debe garantizarse mediante un sistema flexible de prevención de enfermedades, con la creación de una infraestructura médica moderna y una red de tratamientos balneoclimáticos. Todos los ciudadanos, independientemente de su situación económica, posición social y localidad en que residan, deben tener las mismas oportunidades de salud y tratamiento. El paciente tiene derecho a elegir su médico y el médico tiene derecho a ser libre en el ejercicio de su profesión. AUR considera necesario contar con un ejército nacional que sea el único que pueda garantizar la defensa del territorio nacional y la eliminación de cualquier amenaza a la seguridad nacional. AUR tomará todas las medidas necesarias para lograr este objetivo. Son partidarios de establecer un Programa Nacional de entrenamiento militar, técnicas de supervivencia y combate asimétrico para voluntarios, paralelo al ejército profesional, Y desean que RumanÃa también disponga de un «ejército de reserva» formado por ciudadanos. AUR es partidario de una Europa de naciones soberanas y r echazan la idea de un superestado federalista como los «Estados Unidos de Europa», que consideran que está promovido por ciertas instituciones burocráticas y cÃrculos plutocráticos. Sostienen que la Constitución de RumanÃa, como ley fundamental del Estado, debe tener preeminencia en relación con la normativa europea. De modo que s e oponen a cualquier intento de anular su supremacÃa.