Publicado: noviembre 5, 2025, 7:43 am
Mucho se ha comentado en redes sociales en torno a la figura de Paula Caryatides, aunque no precisamente en buenos términos. En los últimos días, la influencer y modelo se ha visto envuelta en una oleada de críticas masivas que apuntan a que, en el pasado, habría llevado a cabo presuntas prácticas abusivas hacia sus becarios.
La polémica se remonta a finales del mes de octubre cuando un usuario de TikTok, aún estudiante en prácticas, denunció haber sufrido «ghosting laboral» (o desaparición súbita sin previo aviso) por parte de Cariatydes mientras se encontraba, supuestamente, en el proceso de selección para un puesto de becario que ofrecía la joven de 28 años.
Esta inesperada revelación, que no tardó en hacerse viral en la plataforma china, abrió la veda y propició que en los siguientes días saliesen a la luz otros testimonios que, a diferencia del primero, contaban algunas de las nefastas experiencias que habrían protagonizado con ella una vez se unieron al equipo en prácticas de Caryatides.
En medio de este escándalo, en el que la influencer desactivó sus perfiles de redes sociales durante varios días, otra compañera del sector, Mariang, de La pija y la quinqui, compartió a través de TikTok un fragmento de un episodio de su pódcast, grabado en el año 2022, en el que relataba sus vivencias como estudiante universitaria y aludía a la época en que trabajó como «asistente» sin contrato de una creadora de contenido.
Entre sus anécdotas, la murciana destacó que hubo una vez en que la creadora en cuestión le pidió que le hiciese la cama a las 14.30 horas. «Y yo, por supuesto, no tengo otra cosa que hacer. Sin comer, cojo mi jet privado para hacerte la cama, y yo como ‘amor, lo siento, es que me da un poco de vergüenza. Luego tengo que intentar irme a dormir sin llorar'», comentaba Mariang, poniendo la nota de humor a la situación.
Además de desempeñar tareas ajenas al puesto de fotógrafa para el que fue convocada, Mariang señaló que no se trataba de prácticas reconocidas con cotización y que le pagaba 200 euros «en negro» con la excusa de que así sería «más fácil» para ella. «Hubo un momento en que me tenía que agarrar a ese clavo ardiendo porque yo quería comprarme mi puré de calabaza todos los días», bromeaba en su pódcast.
Caryatides se disculpa públicamente
Aunque, en ningún momento, Mariang mencionó de forma explícita a Caryatides, muchos usuarios no tardaron en atribuir esta sorprendente anécdota publicada de nuevo varios años después con la reciente situación que atañe a la influencer, a la que acusaron, entre otras cosas, de encomendar supuestamente areas domésticas a sus becarios.
Ante el revuelo causado, y tras varios días de silencio, Paula Caryatides reapareció en su perfil de TikTok para aclarar todas las dudas al respecto de su vida profesional, así como para pedir disculpas públicamente por «haber tardado tanto» en romper su silencio.
Con un fondo blanco y acompañada de su gato, la creadora de contenido explica que su supuesto «ghosting laboral» se debe a que su actual asistente contaba con una excesiva carga de trabajo, que le imposibilitaba revisar la totalidad de las candidaturas que recibían. «Yo debería haberlo supervisado desde el minuto cero para cerciorarme de que esos correos eran contestados a tiempo», admitió.
En este sentido, Cariatydes subrayó que se posiciona radicalmente en contra de que se «juegue con el tiempo», y más en el ámbito laboral. «Así que entiendo que te puedas sentir ninguneado y me duele mucho que pase, cuando encima viene de mí», confiesa la joven, dirigiéndose al estudiante que tiró de la manta al inicio de la polémica.
En lo que respecta al resto de testimonios, que aluden a sus presuntas conductas abusivas hacia sus becarios, la influencer se mostró arrepentida y pidió disculpas por su actitud. «Yo hace 7 años no tenía ni idea de nada, y no sabía ni delegar ni gestionar un equipo. Asigné tareas que no eran asignables y que entiendo que fueran denigrantes para la persona que las estaba desarrollando», afirmó.
No obstante, y aunque admitió que se equivocó, en su vídeo defiende que este asunto debería haber permanecido «en privado» y que la tarea de limpiar y ordenar el set de grabación —donde se incluiría «hacer la cama», entre otras cosas— no considera que sea «denigrante» per sé, en tanto a que, según ella, es esencial para el desarrollo de su actividad. «Voy aprendiendo a gestionar equipos un poco a ciegas y a solas, y a veces me equivoco y la cago mucho», apuntó.
«Si esas personas que están dolidas conmigo, hubiesen venido a hablar conmigo para conseguir esa reparación, yo les hubiese pedido disculpas en persona, y se habría mantenido en el ámbito privado», agregó Cariatydes, lamentando que, tras haber trascendido a la esfera pública, se ha visto sometida a una campaña de acoso (o «bullying», en sus palabras) por parte de los internautas.
