Publicado: abril 22, 2025, 4:30 pm
Samsung está entre las marcas de móviles que se ajustan milimétricamente a los rasgos y al estilo que atraen a sus usuarios. Una estrategia que le funciona tanto en el cauce premium como en la gama media. En esta última, el Galaxy A36 5G lo tiene todo para conquistar a los acostumbrados y contentos con la identidad Galaxy que busquen un smartphone equilibrado y que destaque por su calidad-precio.
El Samsung Galaxy A36 5G se ubica en el rango de los 300-400 euros, horquilla en la que se mueven sus versiones de 6 GB + 128 GB y 8 GB + 256 GB, con precios de 379 euros y 399 euros (empezó en los 449 euros). Por encima se coloca el Galaxy A56 5G (desde 479 euros), siendo el Galaxy A26 5G la opción más asequible de la familia (desde 269 euros).
Especificaciones técnicas principales del Samsung Galaxy A36 5G
- Pantalla: Super AMOLED de 6,7 pulgadas (FHD+, 120 Hz, 1.200 nits)
- Procesador: Qualcomm Snapdragon 6 Gen 3
- Configuraciones: 6 GB + 128 / 8 GB + 256 GB
- Cámaras traseras: principal de 50 MP (OIS) + ultra gran angular de 8 MP + macro de 5 MP
- Cámara frontal: 12 MP
- Batería: 5.000 mAh con carga de 45W
- Conectividad: 5G
- Sistema operativo: One UI 7.0 (Android 15)
- Otros elementos: dual nanoSIM, NFC, sensor de huellas en pantalla, reconocimiento facial, altavoces estéreo, Google Gemini, IP67
- Peso y grosor: 195 gramos y 7,4 mm
- Precio (momento del lanzamiento): 379 euros / 449 euros
La elegancia del color suave
La comentada identidad Galaxy tiene una de sus principales expresiones en la continuidad estilística. En el panorama Galaxy A se manifiesta en el diseño cuidado y elegante y en unos colores siempre muy bien escogidos y plasmados. Su tonalidad lavanda, la que ha probado 20bits, exhibe una intensidad bastante suave, factor que también va enfocado a que la trasera exhiba brillos, reflejos e incluso arcoíris cromáticos (en algunas zonas) al mover el teléfono. El lavanda se torna más azul o más blanco en función de la luz.
Aunque sea de plástico, la trasera depara un tacto agradable. De la composición llama la atención la vuelta a las cámaras alojadas dentro de un módulo oscuro. Aporta contraste y gusta el brillo de los anillos que envuelven los sensores, pero esta elección parece un paso atrás respecto a la tendencia de las traseras limpias (sin módulo) que había adoptado Samsung. En ese sentido, las cámaras lucían mejor en el Galaxy A35 5G.
Los marcos metálicos una vez más resultan sugerentes, al igual que su condición de móvil fino y delgado (solo 7,4 mm de grosor). Y de nuevo gusta que, como en la evolución precedente, el lateral derecho resalte, por medio de una pequeña y estilosa elevación, la presencia de los botones de volumen y bloqueo.
Pantalla en la línea Samsung
Como acostumbran las generaciones de esta popular serie Galaxy, los nuevos miembros cuentan con pantallas Super AMOLED, esta vez de 6,7 pulgadas. La del A35, al igual que la del A55, era de 6,6 pulgadas, de manera que aumenta ligeramente. El panel vuelve a materializar la calidad característica, en esta ocasión revestida de más brillo.
Con resolución FHD+ y fluidez adaptable (hasta 120 Hz), la pantalla ofrece hasta 1.200 nits en el modo de brillo alto frente a los 1.000 nits de antes. Alcanza un brillo máximo local de 1.900 nits. Se defiende bien cuando en el exterior incide la luz solar.
La grata sensación que deja la pantalla no impide percibir que Samsung podría haber reducido el marco negro, un poco más ancho de la cuenta en la parte inferior. También se echa en falta alguna opción más en el apartado de modos de color.
Respecto a la protección visual, contempla la limitación de la luz azul y el uso de colores más cálidos, capa que puede aplicarse de modo adaptable (el sistema ajusta los colores según la hora del día) o personalizado.
Pasando al complemento sonoro, sus altavoces estéreo deparan un audio más que correcto, con el matiz de que en algunos momentos pide mayor depuración.
Fotografía: nada mal
El Samsung Galaxy A36 5G escenifica una composición de cámaras aburrida si se atiende a sus sensores secundarios y a lo común que resulta en el segmento. Sin embargo, la circunstancia no emborrona una fotografía que no está nada mal. En sus imágenes hay viveza y color.
La cámara principal de 50 MP, con estabilización óptica de imagen (OIS), se acompaña de la clásica ultra gran angular de 8 MP y de una macro de 5 MP. Aquí no se puede esperar un teleobjetivo. Con todo, su zoom digital cumple en los 2x y, aunque pierde, en los 4x. En cambio, en el de 10x la definición decae en exceso.
Uno de los reclamos reside en la mejora de la claridad en los vídeos con su cámara para selfis, esta vez con una resolución de 12 MP y que permite grabar en UHD a 30 FPS.
La aplicación de cámara lleva a efecto un acertado cambio en diseño, más intuitivo y vistoso gracias a One UI 7.0. Entre las funciones contempladas figuran el modo retrato, el modo diversión y, en el apartado Más, el modo Pro, el vídeo Pro, el modo nocturno, el macro, la captura única o la cámara rápida. Asimismo, al tener una cámara de 50 MP, la resolución puede modificarse para emplear esta en lugar de los 12 MP aplicados por defecto.
Qualcomm en lugar de Exynos
En el terreno Samsung se prefiere hallar procesadores Qualcomm antes que Exynos, en especial si hablamos de los dispositivos insignia (la serie S, los plegables), cauce en el que casi no se concibe otra cosa. En los escalones inferiores importa menos, pero suele gustar más encontrarse con un Snapdragon. Aunque su hermano mayor lleva el Exynos 1580, el Galaxy A36 5G integra el Snapdragon 6 Gen 3, también fabricado en un proceso de 4 nm. Un chipset solvente en términos de rendimiento y fluidez e indicativo del nivel medio al que se adscribe el smartphone.
Viene con One UI 7.0 (Android 15), software estrenado con los S25 que trae una atractiva renovación de los elementos visuales y más vías de personalización. También implica otro paso en el despliegue de Galaxy AI, si bien las funciones avanzadas presentes en la serie A son muy escasas en comparación con lo que puede hacerse con los gama alta.
En el Galaxy A36 5G aparecen el borrador de objetos, las sugerencias de edición (remasterizar la imagen, borrar sombras, desenfoque de fondo…), los filtros personalizados y, fuera del marco fotográfico, la selección con IA (para seleccionar cosas en la pantalla y tener a disposición una serie de acciones rápidas) y leer en voz alta (para escuchar el contenido de artículos web). Cuenta con Gemini integrado (y con Bixby, claro).
Un detalle relevante y que juega a favor de comprar un Galaxy reposa en su longevidad en lo relativo a la vigencia del software. Para los Galaxy A, Samsung promete seis generaciones de actualizaciones de sistema operativo y seis años de actualizaciones de seguridad.
Interesante autonomía y más carga rápida
Por sus movimientos más cautos, Samsung va a tardar en sumarse a la ola de las baterías más imponentes. El Galaxy A36 5G integra una de 5.000 mAh, capacidad más que conocida que en todo caso posibilita una autonomía interesante y satisfactoria.
El dispositivo resiste las intensidades diarias. Convence con creces lo que aguanta cuando ya se encuentra por debajo del 50%. Las horas de reproducción de vídeo pueden acumularse sin grandes inconvenientes.
El fabricante sí que potencia la carga rápida, que de los 25W (velocidad discretita en estos tiempos) del Galaxy A35 5G sube a los 45W, lo que ya es otra cosa. Con el cargador específico recupera el total de la energía en alrededor de 69 minutos.