Publicado: febrero 20, 2025, 6:41 am
El grupo islamista Hamás y otras milicias palestinas han entregado este jueves por la mañana a la Cruz Roja los cadáveres de cuatro rehenes israelíes en Jan Yunis, al sur de Gaza, en el primer intercambio de restos mortales de cautivos desde el acuerdo de alto el fuego a la guerra que comenzó el pasado 7 de octubre de 2023. Entre los cadáveres se encuentran los de los dos hermanos de corta edad de la familia Bibas y el de su madre. El padre fue liberado con vida el pasado 1 de febrero.
En la retransmisión en directo de la cadena británica BBC se ha podido ver a decenas de milicianos enmascarados y armados con rifles dispuestos en fila en una explanada de en Bani Suhaila, al este de Jan Yunis, y a un convoy de la Cruz Roja que ha llegado para recibir los cuatro ataúdes. Miembros de la Cruz Roja han firmado documentos y han colocado biombos blancos junto a sus vehículos.
Hamás ha entregado cuatro cadáveres más de 16 meses después de su rapto en la Franja de Gaza: los de la madre Shiri y sus hijos Ariel y Kfir de la familia Bibas, de orígenes argentinos, y el de Oded Lifshitz, de 84 años y también tomado a la fuerza del kibutz Nir Oz.
Según se ha podido ver en las imágenes en directo, en primer lugar han sido cuatro hombres completamente vestidos de negro y encapuchados o con la cara tapada han transportado un ataúd desde el escenario habilitado por Hamás hasta uno de los vehículos de la Cruz Roja.
En el citado escenario hay un cartel con la imagen de Shiri con sus hijos Ariel y Kfir y de Oded. En segundo plano en dicha lona hay una gran foto del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, caricaturizado como un demonio y junto a un mensaje que reza «la guerra criminal de Netanyahu y su ejército nazi los mató con misiles». En el escenario levantado en el lugar para el acto también se han colocado municiones supuestamente usadas por el Ejército israelí en los ataques que habrían causado las muertes.
Tras el primer canje, se han producido, uno a uno, los otros tres de la misma forma. Los milicianos vestidos de negro y rostro cubierto han llevado los ataúdes hasta los coches de la Cruz Roja rodeados de una gran multitud de personas y gran expectación mediática.
Confirmación de Israel y Hamás
Posteriormente, el Ejército israelí ha publicado un breve comunicado en el que ha resaltado que «según la información facilitada por Cruz Roja, los cuatro ataúdes con los rehenes fallecidos han sido entregados al organismo y están en camino hacia las fuerzas del Shin Bet y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en la Franja de Gaza», donde siguen desplegadas en varios puntos.
Por su parte, Hamás ha afirmado en un comunicado que «la resistencia ha trabajado para respetar la santidad de los muertos y los sentimientos de las familias durante la ceremonia para la entrega de los cadáveres de los prisioneros, incluso después de que el Ejército de ocupación no respetara sus vidas cuando estaban vivos». «Preservamos la vida de los prisioneros de la ocupación -en referencia a los cuatro secuestrados cuyos cadáveres han sido entregados-, les dimos lo que pudimos y les tratamos con humanidad, pero su Ejército los mató junto a sus captores«, ha denunciado, según ha recogido el diario palestino ‘Filastin‘.
Así, ha reiterado sus acusaciones contra las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) por «matar a sus prisioneros al bombardear sus centros de detención», por lo que ha dicho que «el gobierno nazi de ocupación tiene toda la responsabilidad tras obstruir en repetidas ocasiones un acuerdo de intercambio». Hamás, ha afirmado que el «criminal» Netanyahu «llora hoy sobre los cadáveres de los prisioneros que le han sido entregados en cadáveres, en un flagrante intento de evadir su responsabilidad en su muerte frente a su audiencia».
En este sentido, ha incidido en que el brazo armado de Hamás, las Brigadas Ezzeldín al Qassam, «hizo todo lo que pudo para proteger a los prisioneros» y ha agregado que «los bárbaros y continuados bombardeos por parte de la ocupación evitaron que hayan podido rescatar con vida a todos los prisioneros».
«A las familias Bibas y Lifshitz: hubiéramos preferido que sus hijos volvieran con vida, pero vuestro Ejército y los líderes de vuestro Gobierno eligieron matarlos en lugar de lograr su vuelta. Junto a ellos, mataron a 17.881 niños palestinos con sus criminales bombardeos contra la Franja de Gaza», ha zanjado el grupo.
Los Bibas acabaron en Gaza en manos de las Brigadas Muyahidines -una de las tres principales milicias de Gaza junto a Hamás y la Yihad Islámica-, mientras que Yardén quedó aislado del resto de su familia.
Ya el 29 de noviembre de 2023, el brazo armado de Hamás anunció que los tres Bibas habían muerto en un bombardeo israelí unos días antes, algo que Israel no confirmó. El padre, Yarden, se salvó supuestamente al estar retenido en otro sitio y fue liberado en el canje del pasado 1 de febrero.
La mujer de Lifshitz, Yocheved, fue liberada durante la primera y única tregua de la guerra en noviembre de 2023, cuando 105 rehenes (entre ellos todos los menores con vida) fueron puestos en libertad por 240 presos y detenidos palestinos.
La oficina de Netanyahu confirmó este miércoles que había recibido la lista con los nombres de los rehenes cuyos cuerpos serían entregados este jueves y confirmó sus identidades. «En estos momentos difíciles, nuestros corazones están con las familias de luto», manifestó. Poco después, la familia Bibas afirmó que no había dado su permiso para que sus nombres fueran publicados, tras lo que la oficina de Netanyahu acusó del error al Ejército, que se disculpó por lo que describió como «un error de buena fe», según ha recogido el diario israelí ‘The Times of Israel‘.
El padre, liberado el 1 de febrero
El grupo islamista anunció en noviembre de 2023 que Shiri, Ariel y Kfir Bibas habían muerto en un bombardeo israelí contra Gaza en el marco de la ofensiva y publicó un vídeo de Yarden Bibas -marido de Shiri y padre de los niños-, entonces retenido y liberado el 1 de febrero en el marco del acuerdo de alto el fuego, culpando a Netanyahu de sus muertes, tras lo que el Ejército israelí habló de una campaña de «terror psicológico».
De hecho, las autoridades israelíes rechazaron confirmar que estas tres personas hubieran fallecido y, de hecho, pidieron en varias ocasiones al grupo islamista palestina que confirmara si estaban con vida. El anuncio del martes de Hamás y la entrega de sus cuerpos confirmó las afirmaciones del grupo sobre su muerte bajo cautiverio, a la espera de que las autopsias determinen las causas.
Nuevo canje este sábado
La entrega de los cadáveres tiene lugar dos días antes de que Hamás libere a otros seis rehenes que siguen con vida, identificados como Tal Shoham, Omer Shem-Tov, Eliya Cohen, Omer Wenkert, Avera Mengistu, y Hisham al Sayed, tras lo que Israel procederá a una nueva tanda de excarcelaciones de palestinos.
Mengistu, un etíope-israelí, y Al Sayed, un beduino israelí, fueron secuestrados en 2014 y 2015, respectivamente, después de entrar en la Franja por su propio pie, tras lo que fueron detenidos y puestos bajo custodia de Hamás. De esta forma, ambos llevan alrededor de una década retenidos en el enclave palestino.
Hamás afirmó que los seis son los únicos de la lista de 33 pactada para la primera fase del alto el fuego en Gaza, en vigor desde el 19 de enero, que siguen sin vida. Los otros rehenes de la lista son Itzik Elgarat, Shlomo Mantzur, Ohad Yahalomi y Tsahi Idan, si bien las autoridades de Israel solo han confirmado oficialmente la muerte de Mantzur.
El proceso tiene lugar además en un momento en el que el Gobierno de Israel y Hamás deberían acometer las negociaciones para la segunda fase del alto el fuego, que en teoría incluye un alto el fuego permanente, si bien por ahora no han arrancado los contactos, en medio de las crecientes críticas por parte de aliados ultraderechistas y ultraortodoxos de Netanyahu a la opción de seguir adelante con las conversaciones.
Así, diversos aliados del primer ministro han hecho llamamientos durante los últimos días a favor de romper las negociaciones y retomar la ofensiva militar contra Gaza, si bien Qatar, uno de los mediadores, afirmó el martes que existe una «atmósfera positiva» de cara al inicio de esta nueva tanda de negociaciones.
Por otra parte, el futuro del enclave tras el conflicto es igualmente objeto de intensas discusiones, especialmente después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, planteara un desplazamiento forzoso de población palestina a países de la región e incluso pusiera sobre la mesa que Washington controle el territorio, algo rechazado ya por la Autoridad Palestina, Hamás, otras facciones palestinas y la mayoría de la comunidad internacional.