Publicado: marzo 12, 2025, 9:07 pm

En Estrasburgo (Francia) se ha votado este miércoles una resolución «sobre el mantenimiento del apoyo inquebrantable de la Unión Europea a Ucrania tras tres años de la guerra de agresión de Rusia». El texto se ha sometido a referéndum punto por punto, obligando a los eurodiputados a expresar su parecer sobre cada una de las afirmaciones que recoge la declaración. Un vistazo a la letra pequeña del documento, y a lo que ha votado cada formación, sirve para retratar a los partidos. En el caso de Vox: reafirma que su adhesión a Donald Trump es plena, incluso con la invasión de Ucrania de por medio.
El Parlamento Europeo ha consensuado expresar una «profunda preocupación por el aparente cambio en la postura de los Estados Unidos sobre la guerra de agresión de Rusia». Menciona la resolución, para explicar ese giro de Trump, que el presidente estadounidense «culpa abiertamente a Ucrania de la guerra en curso» -dijo que el país pudo «haber llegado a un acuerdo» al principio del conflicto- y le critica por «suspender la ayuda militar estadounidense e intentar coaccionar a Ucrania para que renuncie a su derecho a la legítima defensa y haga concesiones territoriales».
Vox ha votado en contra de incluir esta condena en la resolución europea, alineándose así en su parecer con el expresado por el partido del primer ministro húngaro Viktor Orban -con el que comparte grupo europeo, Patriots-. Sin embargo, la formación de la francesa Marine Le Pen, con quien Santiago Abascal también suele ir de la mano en Europa, se ha desmarcado de esta postura y se ha abstenido sobre esa crítica al giro de Trump.
Lo mismo ha vuelto a suceder al valorar el punto 12 de la resolución. Este dice que el Parlamento Europeo «expresa su consternación por la política del Gobierno estadounidense de apaciguar a Rusia y atacar a sus aliados» y advierte de que «esta política mina la confianza de los aliados tradicionales de EEUU en todo el mundo y puede tener consecuencias devastadoras para el vínculo transatlántico, la paz y la estabilidad dentro y fuera de Europa». Vox y Fidesz -el partido de Orban- han votado en contra de incluir estas palabras en el documento salido de Estrasburgo, mientras que los de Le Pen se han abstenido.
Los seis eurodiputados de la formación de Abascal, encabezados por Jorge Buxadé, se han opuesto a un tercer artículo del texto que hace referencia a los movimientos de Trump respecto a la invasión rusa. Este expone que el Parlamento Europeo «lamenta rotundamente cualquier intento de chantajear a los dirigentes de Ucrania para que se rindan al agresor ruso con el único fin de anunciar un supuesto acuerdo de paz».
El redactado también califica de «contraproducentes y peligrosos […] los actuales intentos del Gobierno de EEUU de negociar un alto el fuego y un acuerdo de paz con Rusia excluyendo a Ucrania y a otros Estados europeos, a los que se presenta un resultado sin que tengan una participación significativa». Señala la resolución aprobada en Estrasburgo que estos «intentos» de negociación de Trump «terminan por animar al Estado beligerante, y muestran por tanto que las políticas agresivas no se castigan, sino que reciben recompensa».
Vox ha votado en contra de estas afirmaciones, como también lo han hecho los eurodiputados de Orban y Le Pen. El partido de Abascal ha venido insistiendo en su confianza en que el presidente estadounidense no dejará a Ucrania al margen de la negociación, pero se ha mostrado reticente a condenar los pasos dados por Trump en este sentido, emplazándose a conocer los términos en los que se llegue a un hipotético acuerdo de paz. En esa línea, hoy ha rechazado firmar en Europa el texto con el que el organismo comunitario hace explícita su condena a la forma de proceder del republicano en esta materia.
Vox también ha votado en contra de «acoger con satisfacción» las conclusiones de la reunión extraordinaria del Consejo Europeo del pasado 6 de marzo, en la que se acordó un plan de rearme del continente.
Abascal, y los distintos dirigentes de su partido, sostienen que la responsabilidad de la invasión de Ucrania reside en los «burócratas de Bruselas» y, concretamente, en el presidente español, Pedro Sánchez, al que acusa de «pagar las bombas que lanza Rusia» mediante la compra de gas a ese país. Vox apuesta por cortar esas adquisiciones, pero hoy se ha posicionado en contra de un artículo de la resolución que recogía «prohibir» las importaciones rusas a la Unión Europea -«o aplicarles aranceles específicos»-. El texto menciona expresamente «todos los tipos de petróleo y gas» entre los productos rusos cuya entrada se propone vetar o dificultar.