Publicado: julio 8, 2025, 1:53 pm
Un nuevo enfoque terapéutico ha mostrado resultados prometedores en el tratamiento del cáncer de próstata avanzado resistente a los tratamientos hormonales. Según un estudio internacional publicado hoy en la prestigiosa revista ‘ The Lancet Oncology ‘, la combinación de dos fármacos, cabozantinib y atezolizumab , logra reducir en un 35% el riesgo de progresión o muerte en pacientes con metástasis y sin opciones eficaces disponibles hasta ahora. El ensayo clÃnico de fase 3, denominado CONTACT-02, incluyó a 507 pacientes con cáncer de próstata metastásico resistente a la castración, que ya no respondÃan a los inhibidores del receptor de andrógenos, uno de los tratamientos más comunes. Estos pacientes suelen enfrentarse a un pronóstico muy complicado, especialmente aquellos con metástasis en tejidos blandos como el hÃgado. «El cáncer de próstata en esta fase avanzada y resistente a la terapia hormonal tiene una supervivencia media inferior a los dos años, y los tratamientos actuales ofrecen beneficios limitados», explica Joan Carles, oncólogo del Hospital Universitario Vall d’Hebron e investigador del Vall d’Hebron Instituto de OncologÃa (VHIO), y coautor del estudio. Tras casi 12 meses de seguimiento, los pacientes que recibieron la combinación de cabozantinib, un inhibidor de la tirosina quinasa, y atezolizumab, una inmunoterapia que bloquea la proteÃna PD-L1, experimentaron una supervivencia libre de progresión de 6,3 meses, frente a los 4,2 meses en quienes recibieron un segundo tratamiento hormonal convencional. Aunque la supervivencia global aún no mostró diferencias estadÃsticamente significativas, sà se observó un aumento notable de cerca de cinco meses en pacientes con metástasis hepáticas, lo que refuerza el potencial de esta terapia en casos especialmente agresivos. Este estudio representa la primera vez que una combinación de inmunoterapia e inhibidor de tirosina quinasa supera a un segundo tratamiento hormonal en este tipo de cáncer, y podrÃa marcar un cambio importante en la forma de abordar estos casos. « Los resultados nos dan esperanza y podrÃan abrir la puerta a una nueva opción terapéutica para pacientes que hasta ahora tenÃan alternativas muy limitadas, más allá de la quimioterapia», concluye el Dr. Carles.