Diego Montaña, Kaio Amaral Silva y Alejandro Freire (Yumba) han sido declarado culpables de asesinato con alevosía y ensañamiento de Samuel Luiz del 3 de julio de 2021 en el paseo marítimo coruñés. Alejandro Míguez ha sido considerado cómplice y Catherine Silva (Katy), inocente.
Es la traducción jurídica de la decisión del jurado que juzgó a los cinco acusados adultos del crimen y que deliberó durante cerca de seis días.
Los miembros del tribunal coinciden por unanimidad en que Diego Montaña y Alejandro Silva son culpables, y Katy Silva es inocente, absuelta por lo tanto de las acusaciones de asesinato y de cómplice que le atribuían. La decisión relativa a los otros dos procesados la adoptaron por mayoría.
El jurado popular también considera acreditado el carácter homófobo del crimen en el caso de Diego Montaña, la persona que inició la agresión que se convirtió en grupal y mortal. Concluyen que actuó por su animadversión hacia la orientación sexual que le atribuyó a la víctima, al que agredió tras llamarle «maricón».
A Kaio Amaral, además del asesinato, le acusan de un delito de robo con violencia. Por unanimidad, consideran probado que se llevó el móvil de la víctima.
Sin posibilidad de defensa
Los miembros del tribunal concluyen que Diego Montaña fue la persona que inició la agresión y que se ensañó con la víctima por su orientación sexual. Consideran que su animadversión hacia la homosexualidad «motivó la reacción tan agresiva contra Samuel». También llegaron a la conclusión de que, como miembro del «grupo agresor», eliminó toda posibilidad de defensa de la víctima.
En el caso de Alejandro Freire, lo sitúan en el lugar de la paliza en los momentos iniciales de la misma y apelan al vídeo sobre la agresión que se visualizó durante el juicio para concluir que «le dirige golpes». También consideran probado que le hizo a Samuel la técnica del mataleón durante la agresión y concluyen que lo agredió «por sorpresa» y, como miembro de ese grupo agresor, contribuyó a «eliminar las posibilidades de defensa de la víctima».
Del «núcleo agresor» también era parte Kaio Amaral, que participó en la paliza, evitó que Samuel se defendiese, se llevó su móvil y lo desconectó, pero dejan fuera a Alejandro Míguez, al que relegan al papel de cómplice. Concluyen que «ningún testigo» le vio agredir a la víctima si bien sí tuvo participación en el resultado al evitar que otros de los agresores le golpeasen.
Katy Silva, que ha permanecido en libertad los más de tres años transcurridos desde el crimen, queda ahora exonerada de toda responsabilidad. «No es culpable como coautora de la muerte de Samuel, ni como cómplice», concluyeron los miembros del tribunal popular, que entienden que «trató de contener a Diego», que entonces era su novio, cuando empezó a pegar al joven enfermero coruñés e «intentó de separarlo de Samuel».
Tras su deliberación, llegaron a la conclusión de que no pueden «dar por probado» que esta acusada intentase separar a Lina, la amiga que esa noche estaba con Samuel haciendo una videollamada cuando empezó la agresión. «Ella no es parte del grupo agresor», señalaron en su veredicto.
Sin atenuantes
La decisión del jurado también rechaza que se puedan aplicar atenuantes en la acción de los acusados Diego Montaña y Alejandro Freire. Descarta que tuviesen mermadas sus capacidades por la ingesta de alcohol y, en el caso de Freire también que su comportamiento estuviese afectado por un trastorno de personalidad unido al consumo de cocaína. «Lo vemos andando rápido por lo que no creemos que tuviera afectadas sus facultades», señalan sobre él.
El jurado se había encerrado a deliberar el lunes 18 a las 17.30 horas y a primera hora de este domingo comunicaron que tenían ya una decisión. Durante todo este tiempo estuvieron aislados para lograr responder a un objeto de veredicto conformado por más de un centenar de preguntas que fueron respondiendo a partir de la una de la tarde.