Sánchez acusa a Israel de provocar un «infierno a cielo abierto» en Gaza y pide a la UE romper ya relaciones con Netanyahu

La causa palestina sigue siendo uno de los grandes temas para Pedro Sánchez. La intensa agenda internacional de estas semanas permite un respiro al presidente del Gobierno respecto a los temas nacionales, donde la UCO sigue sus investigaciones sobre una presunta trama corrupta en el seno del PSOE y del Gobierno. El presidente del Gobierno es uno de los líderes europeos que de manera más clara pide a la Unión Europea romper relaciones con Israel por no respetar los derechos humanos.

Durante su asistencia al Consejo Europeo en Bruselas, Sánchez ha empleado un discurso muy duro con Israel. A primera hora denunciaba «la situación catastrófica de genocidio» en Gaza. Y a última hora describía la situación en Gaza y Cisjordania como «un infierno a cielo abierto». La mención a un «genocidio» provocó que la embajada israelí en Madrid acusara al Gobierno de estar «en el lado equivocado de la historia» y de iniciar «una cruzada antiisraelí». España, por su parte, decidió convocar al encargado de negocios de la embajada de Israel en Madrid, Dan Poraz -no hay embajador o embajadora en estos momentos-, por su «inaceptable comunicado sobre el Gobierno de España».

Desde hace tiempo, Sánchez mantiene una posición muy firme en este asunto, reclamando el respeto al derecho internacional y los derechos humanitarios y denunciando los ataques de Israel. «Tenemos que decirle al Gobierno de Netanyahu basta ya», fue su mensaje este jueves. Pide que se adopten nuevas medidas y fija el marco para hacerlo la reunión que se celebrará en julio del El Consejo de Asuntos Exteriores. Este órgano se encarga de la acción exterior de la UE, que incluye política exterior, defensa y seguridad, comercio, cooperación para el desarrollo y ayuda humanitaria.

España pide que la UE rompa el Acuerdo de Asociación con Israel por incumplir su artículo 2. Este punto establece que «las relaciones entre las Partes, así como todas las disposiciones del presente Acuerdo, se fundamentan en el respeto de los principios democráticos y de los derechos humanos, que inspira sus políticas interiores y exteriores y constituyen un elemento esencial del presente Acuerdo».

Esta petición ya la trasladaron nuestro país e Irlanda en una carta enviada en febrero de 2024 a la Comisión Europea. Entonces pedían «una evaluación urgente del Acuerdo de Asociación UE/Israel para que investigue si se están cumpliendo los puntos esenciales de la relación en materia de derechos humanos y principios democráticos». Ahora Sánchez lleva tiempo pidiendo romper ya este acuerdo, pero se trata de un asunto que no genera unanimidad entre los 27 miembros de la UE.