Publicado: mayo 29, 2025, 12:04 pm
Cada vez más escuchamos hablar del exposoma , término acuñado en 2005 por el director de la Agencia Internacional de Investigación sobre Cáncer, el epidemiólogo molecular, Christopher P. Wild. Pero ¿qué significa?. El vocal nacional de Dermofarmacia del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Tomás Muret define el exposoma «como el conjunto de factores ambientales y de exposición a los que estamos sometidos a lo largo de toda la vida, factores externos que tienen un impacto y que actúan sobre nuestro genoma y nuestra salud«. En la actualidad, la genética y el estudio de nuestros genes explica, aproximadamente, el 25% de las enfermedades crónicas. Sin embargo, el 75% restante estarÃa determinado por todos estos factores externos que repercuten en nuestra salud, es decir, por nuestro exposoma. Factores externos como el entorno en el que vivimos, la contaminación ambiental, los factores climáticos y la temperatura, el estrés , la alimentación que seguimos, la actividad fÃsica y nuestro propio metabolismo. En el caso de la piel se está estudiando el exposoma de la piel, definiendo e incluyendo aquellos factores que tiene o guardan correlación con el envejecimiento de la piel. «En este sentido, se han identificado hasta ocho factores externos que presentan una relación directa con el cuidado y la salud de nuestra piel. Estamos hablando de la radiación solar , la contaminación del aire, el tabaco, la nutrición, la temperatura, el estrés y la falta de sueño «, explica Tomás Muret. Precisamente el exposoma fue uno de los temas tratados durante la celebración de la 7ª Edición de MásDermo , la Jornada Nacional de Dermofarmacia, organizada por el Consejo General de Colegios Farmacéuticos y a la que asistieron más de 1.000 profesionales de toda España. «En la farmacia hemos evolucionado del consejo farmacéutico sobre los cuidados de la piel al servicio dermofarmacéutico que se sustenta en cuatro pilares fundamentales: la revisión del tratamiento farmacológico, el exposoma, la rutina cosmética y la suplementación«, detalló Muret durante la jornada. Sobre el primer pilar detalló que el farmacéutico, como experto en el medicamento, debe ayudar a los pacientes a usarlos correctamente, a detectar interacciones o efectos adversos que puedan estar afectando a la piel. «Detrás de un problema cutáneo -ha afirmado- puede haber un tratamiento con efectos secundarios que pasan desapercibidos». Respecto al exposoma, apuntó que en la farmacia comunitaria, como profesionales sanitarios, los farmacéuticos tienen una visión completa del paciente. «No nos quedamos en la superficie -argumenta-. Analizamos sus hábitos de vida: alimentación, sueño, niveles de estrés, exposición solar, polución… Todo lo que influye en el estado de su piel». En cuanto a las rutinas cosméticas, tan sujetas a modas, Muret defendió que en la farmacia hay que recomendar siempre rutinas personalizadas , adaptadas a la piel, a las necesidades de cada persona y a su evolución y a unas expectativas realistas. Del último pilar del servicio dermofarmacéutico, comentó que «cuando la suplementación está bien indicada, con conocimiento y rigor farmacéutico, puede mejorar claramente la salud de la piel». Y ha apelado a la cordura: « No podemos pasar de pacientes polimedicados a polisuplementados «.