Publicado: noviembre 7, 2025, 5:07 am
La dirección del PP cree que Pedro Sánchez ha llegado al callejón sin salida definitivo de la legislatura, después de que Junts haya formalizado su veto a todas las iniciativas del Gobierno. Y, sin embargo, también cree que la legislatura va a continuar. Miembros de la cúpula de Génova hablan de falta de legitimidad, pero el equipo directo de Alberto Núñez Feijóo acota que «el Gobierno, más que no tener legitimidad, lo que no tiene es capacidad para seguir». «La labor del Ejecutivo es impulsar medidas… salvo que tu único interés sea protegerte en lo judicial», añaden, para hacer ver que Sánchez se aferra al cargo por interés personal.
Una vez que el PSOE y Sumar no pueden contar con los siete votos de Junts, en Génova consideran que «cada Consejo de Ministros pasa a ser una farsa, porque ¿qué van a aprobar sabiendo que va a caer luego en el Congreso?». «Sin el legislativo, la capacidad ejecutiva del Gobierno queda en parálisis y sólo le queda la atención judicial. No podemos tener una parálisis de 20 meses. El tiempo juega en contra de Sánchez, porque cada día que no pones nada en el BOE, te conviertes más y más en un Gobierno reactivo, que sólo opina de cosas pero no avanza decisiones», añaden las mismas fuentes.
Junts per Catalunya solemnizó ayer que, a partir de ahora, sus diputados bloquearán todas las iniciativas del Gobierno, y para el PP, esto acredita que la legislatura no sólo ha sido «fallida», sino que ya está «finalizada». Esto significa que la cúpula popular cree que esta vez el órdago de Carles Puigdemont es real. «Partimos de que Junts lo va a cumplir. Y en el tiempo en que comprobamos si sí o no, seguiremos en parálisis», aseguran.
Sin embargo, el presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, no se cree la ruptura. Para él todo esto se trata de un divorcio tipo Sálvame. O sea, «decir que rompen pero seguir cobrando juntos la exclusiva».
Sea como fuere, el PP va a aprovechar este impasse de bloqueo legislativo para redoblar sus críticas contra los «escándalos» que rodean al Ejecutivo de coalición. «Vamos a seguir siendo categóricos en corrupción y a la vez vamos a ir dando pinceladas semanales de lo que haremos por España cuando gobernemos. Hay una contraposición clara: nosotros exhibiremos una hoja de ruta de la España que viene y ellos exhibirán una hoja de servicios de parálisis y de Koldo, Ábalos, Cerdán, Jésica…». El análisis que hace Génova es que Sánchez ya «no tiene gestión con la que tapar la corrupción». «Pueden sacar a Franco ocho veces más, que no va a funcionar, porque ya no hay más», ironizan.
La formación independentista, con siete votos decisivos en el Congreso, anunció ayer enmiendas a la totalidad a todas las leyes que el Gobierno tiene en ciernes tanto en la mesa del Consejo de Ministros como en tramitación en el Congreso. «La legislatura queda bloqueada», afirmó la portavoz de Junts en la Cámara Baja, Míriam Nogueras. La única posibilidad que se abre ahora ante el Ejecutivo es pactar con el PP o con Vox. Y ambos se niegan con rotundidad.
«¿Cómo era eso del Gobierno más estable de Europa?», sintetizó Alberto Núñez Feijóo en un tuit. Y la vicesecretaria de políticas sociales del PP, Carmen Fúnez, advirtió de que las enmiendas a la totalidad de Junts contra Sánchez son «insuficientes» porque «no borran los imputados, ni los juicios abiertos, ni que un número dos del presidente del Gobierno esté en prisión y el otro a punto de juicio oral».
Fúnez señaló que ésta es una legislatura «fallida» y «está finalizada», porque hay una total «falta de Gobierno, falta de presupuestos y falta de gestión». «Lo que queremos es devolverles la voz a los españoles en las urnas» y «decidir un cambio y un nuevo Gobierno», remató.
