Publicado: octubre 30, 2025, 5:07 pm
Si bien Pedro Sánchez era el claro protagonista de la comparecencia de este jueves en la comisión del Senado que investiga el caso Koldo, quienes tenían la responsabilidad de interrogarle han jugado un papel muy relevante en el transcurso de la jornada. De las preguntas estrictamente relacionadas con la financiación del PSOE y con sus ex secretarios de Organización imputados, José Luis Ábalos y Santos Cerdán, la conversación ha virado en las intervenciones de algunos senadores hacia temas tan dispares como la inmigración, la dana, los presupuestos o las inversiones territoriales. «No está dentro del objeto de esta comisión» ha sido una de los reproches más pronunciados por el presidente de la comisión. Y, frente a la fórmula pregunta-respuesta, algunos parlamentarios han optado por alargar su propia intervención, dando voz al discurso de sus respectivos partidos y desviando el foco del interrogatorio. Estos han sido, así, los otros 13 protagonistas de la jornada.
María Mar Caballero (UPN)
Por ser su partido el que tiene menor representación en el Senado, María Mar Caballero, de Unión del Pueblo Navarro (UPN), era la parlamentaria encargada de abrir el cuestionario al presidente del Gobierno. Apenas se ha demorado 10 segundos hasta hacer plantear la primera cuestión a Sánchez: «¿Puede aclararnos si ha recibido alguna vez algún pago en efectivo en su partido en sobres? ¿Sí o no? Es una pregunta concreta», ha sintetizado. El presidente del Gobierno se ha desviado del asunto al inicio de su intervención, y hasta en tres ocasiones le ha tenido que interrumpir Caballero para insistir en su interrogante hasta conseguir la respuesta: «En alguna ocasión he podido liquidar gastos, siempre contrafactura».
La senadora de Unión del Pueblo Navarro (UPN), María Mar CaballeroEFE
Caballero se ha acogido a la fórmula de pregunta-respuesta rápida, obteniendo algunas de las aclaraciones más concisas de Sánchez en lo relativo a la financiación del PSOE. A ella es a quien ha negado haber recibido más de 1.000 euros en efectivo, a quien ha garantizado que «nunca» han existido sobresueldos en su partido y que «no hay nada absolutamente ilegal» en la adjudicación de obras públicas investigada también como parte del caso. Al final de su intervención, sin embargo, Caballero ha preguntado a Sánchez por detalles de cuando recorrió España en la campaña a las primarias del PSOE de 2017 junto a los hoy imputados, dando pie a que el presidente se mostrara más relajado: «¿De verdad, señoría, vamos a estar toda la mañana hablando de quién iba en el Peugeot?», le ha dicho.
Ángel Pelayo Gordillo (Vox)
El senador elegido en el turno de Vox, Ángel Pelayo Gordillo, ha tardado sin embargo tres minutos en hacer la primera pregunta a Sánchez. Antes, en una «introducción» -como lo ha calificado el presidente del Gobierno-, Gordillo ha hablado de los incendios, el apagón, la inmigración, el confinamiento por el coronavirus y la escasa presencia de Sánchez en el Senado, entre una larga lista. También ha puesto sobre la mesa, más tarde, el nombre del suegro del presidente del Gobierno y de Begoña Gómez. Pero sin demasiado éxito en la obtención de respuestas del jefe del Ejecutivo.
Sánchez, ante un interrogatorio mucho menos conciso, ha podido cargar también de vuelta contra Vox. Ha criticado, por ejemplo, la intensa actividad de los de Santiago Abascal en los juzgados contra él y ha sacado a relucir las multas impuestas por el Tribunal de Cuentas contra Vox por recibir donaciones irregulares.
Uxue Barkos (Geroa Bai)
La ex presidenta navarra Uxue Barkos, hoy senadora por Geroa Bai, ha relajado el tono bronco que venía teniendo la interlocución entre los senadores y el presidente del Gobierno. Barkos no ha preguntado a Sánchez nada sobre las informaciones reveladas por la investigación del caso Koldo, sino que se ha limitado a instarle a garantizar su compromiso con Navarra. Eso sí, saliéndose por completo del objeto de la comisión, Barkos ha aprovechado su turno de palabra para cargar contra UPN: «Cobrar una dieta de 2.500 a las 10 de la mañana y otra dieta de 2.500 a las 10.30 será legal, pero es corrupción», ha dicho en referencia velada.
Fabián Chinea (Agrupación Socialista Gomera)
Tampoco ha puesto en complicaciones a Sánchez el senador por Agrupación Socialista Gomera, Fabián Chimea. «Esto no es ningún juzgado», ha dicho para excusar no ser incisivo en su interrogatorio, y ha valorado que las explicaciones dadas hasta ahora por los socialistas son suficientes. Además, ha empatizado con Sánchez por la «persecución que padece por algunos sectores de la derecha política y mediática de este país». Chimea, después, ha hablado al presidente del Gobierno sobre las necesidades de la isla de La Gomera.
Enric Morera (Compromís)
El turno del senador por Compromís, Enric Morera, ha sido algo más bronco, pero no entre él y Sánchez, sino entre él y el presidente de la comisión, el popular Eloy Suárez. Morera ha iniciado su intervención con reproches al presidente valenciano, Carlos Mazón, por no dar explicaciones sobre su paradero el día de la dana, y a partir de ahí ha cargado contra los populares por distintos motivos: ha hablado de que «rompieron los ordenadores a martillazos» para destruir pruebas sobre el caso Gürtel y ha tildado de «ignominia» que hayan llamado a Sánchez a comparecer en la comisión investigación del Senado. «Me cogen ganas de preguntarle si es usted responsable de la muerte de Kennedy«, ha llegado a ironizar. Tras tres llamadas al orden de Suárez por no ajustarse al «objeto» de la sesión, el presidente de la comisión le ha retirado la palabra.
Carla Antonelli (Más Madrid)
No ha sido la parlamentaria de Más Madrid, Carla Antonelli, demasiado punzante en su interrogatorio a Sánchez. Sin embargo, cuando la también diputada en la Asamblea de Madrid le ha preguntado por la salida de Ábalos de su Gobierno y el porqué de incluirle después en las listas, el jefe del Ejecutivo ha deslizado algún detalle novedoso: ha responsabilizado a la federación del PSOE en la Comunidad Valenciana de haberle integrado en la candidatura de 2023 y ha dicho que es «habitual» que, quien tuvo cargo de ministro, repita en las listas siguientes.
Más allá de eso, el turno de Antonelli ha dado lugar a que el presidente del Gobierno, cómodo, sacara a relucir la «máquina del fango». La senadora de Más Madrid ha empatizado con Sánchez y ha criticado que hayan «entrado en su esfera íntima», en referencia al caso de Begoña Gómez. «Me es imposible ponerme en su piel y el brutal acoso que ha recibido», ha dicho, para criticar a quienes han insinuado que Gómez era una mujer transexual, «como si esto fuera algo denigrante, despectivo y peyorativo». Por su valoración de esto ha preguntado también a Sánchez.
Pedro Manuel Sanginés (Coalición Canaria)
El senador de Coalición CanariaPedro Manuel Sanginés ha ahondado en las responsabilidades políticas que tiene Sánchez por ser quien nombró a los hoy imputados, pero su intervención también ha dado pie a que el presidente del Gobierno se desviara del foco. El jefe del Ejecutivo ha llegado a leer parte de la sentencia del caso Gürtel que motivó la moción de censura a Mariano Rajoy en 2018 y sus referencias a la caja B del PP han despertado las quejas de los senadores populares, y del presidente de la comisión.
Eduard Pujol (Junts)
El turno de Junts ha estado cargado de referencias a la coyuntura que afrontan los neoconvergentes y socialistas fuera de la Sala Clara Campoamor del Senado, donde se ha materializado la comparecencia de Sánchez. «El Estado con Cataluña siempre juega con ventaja», ha deslizado el senador Eduard Pujol, que también ha reprochado al presidente del Gobierno el incumplimiento de lo pactado para su investidura. El parlamentario de Junts ha hablado de la «guerra sucia en Cataluña» y de lawfare, y ha motivado que Sánchez repita su afirmación de que «hay una minoría [de jueces] que hace política de las causas judiciales».
Por contra, las interpelaciones de Pujol sobre el caso Koldo han sido en tono irónico: «Cuando le explican las andanzas [de Ábalos y Koldo García], ¿piensan que podrían haber sido perfectamente personajes del entorno del PP en los años 2000?», le ha preguntado. Sánchez no ha entrado al juego.
Gorka Elejabarrieta (EH Bildu)
El senador de Bildu ha trasladado su respaldo a Sánchez y ha secundado algunas de las afirmaciones que vienen defendiendo los socialistas sobre las causas judiciales de su entorno. «¿Cree que detrás de todo esto existe una motivación política por echarle del Gobierno?», ha sido su primera pregunta al jefe del Ejecutivo. Incluso, Gorka Elejabarrieta ha llegado a decir que «es posible que a Cerdán le estén haciendo lo que le están haciendo por la relación que ha tenido como interlocutor con EH Bildu».
Sobre el objeto de la comparecencia, el senador abertzale ha preguntado a Sánchez por la limpieza de las primarias del PSOE de 2017, por su relación con el comisionista Víctor de Aldama -«absolutamente ninguna»- y por Leire Díez, que ha negado que realizara algún encargo para los socialistas. «Que me conste a mí», ha agregado.
Joan Queralt (ERC)
Casi siete minutos ha tardado el senador de ERC Joan Queralt en dar paso a Sánchez para que respondiera a su primera pregunta. Ha hablado de lenguas cooficiales y lawfare, y ya después ha instado al presidente a aclarar, de nuevo, por qué sacó a Ábalos del Gobierno en 2021. «Fundamentalmente, las razones [de la remodelación de su Ejecutivo] fueron políticas», ha repetido.
En lo que tiene que ver con corrupción, Queralt se ha enzarzado con Sánchez por un asunto que apenas se había abordado: las irregularidades en la contratación pública. Sin embargo, el senador de ERC ha centrado su interrogatorio en el futuro, y no en analizar lo ocurrido en el caso Koldo: ha instado a Sánchez a regular que cualquier empresa involucrada en una trama de corrupción quede inhabilitada para la contratación pública.
Al término de su turno, Queralt ha ironizado: «Espero ver en ‘Polònia’ [programa cómico de imitaciones de TV3] un acta realmente auténtica de la sesión de hoy». El comentario ha despertado cierta risa en Sánchez.
Alfonso Gil (PSOE)
En el turno de los socialistas, el senador Alfonso Gil se ha dirigido directamente a quienes estaban en el banco a su izquierda, girando incluso su cuerpo. Les ha reprochado que eligieran este día, siguiente al primer aniversario de la dana, como fecha para citar a Sánchez en el Senado. Como antes había hecho Sánchez, ha citado la sentencia del caso Gürtel y se ha referido a la destrucción de pruebas en aquella trama, para contraponerlo con la gestión que el PSOE ha hecho de sus casos de corrupción. Siete minutos ha durado solo su intervención -disponía de 50-, en la que no ha hecho ninguna pregunta al presidente del Gobierno.
Alejo Miranda de Larra (PP)
Alejo Miranda de Larra ha sido el encargado de tomar la palabra en nombre de los populares, tras varios días manteniendo la incógnita sobre quién sería el elegido. El arranque de su intervención ha sido tenso, después de que Miranda reprochara a Sánchez que Ábalos y Koldo García obtuvieran presuntamente comisiones de la venta de mascarillas mientras otros españoles estaban hospitalizados por el coronavirus. El presidente del Gobierno le ha respondido mencionando, como ya había hecho antes en la sesión, a Isabel Díaz Ayuso y la intermediación de su hermano en un contrato de mascarillas para la Comunidad de Madrid.
Miranda ha preguntado a Sánchez si su hermano vivió en Elvas (Portugal) para pagar menos impuestos mientras trabajaba en la Diputación de Badajoz. «¿Qué tiene que ver con el objeto de esta comisión?», se ha escudado el jefe del Ejecutivo, y el presidente de la Sala le ha amparado en su silencio. «Lleva el señor Sánchez toda la mañana diciendo lo que le da la gana…», ha criticado Miranda, acusándole de «no querer dar la cara» sobre el caso de su hermano. Miranda también ha dicho del jefe del Ejecutivo que sufre «amnesia selectiva» por utilizar fórmulas como «no, que recuerde» en algunas de sus respuestas. Apenas ha logrado el senador del PP sacarle información novedosa a Sánchez: «En 20 minutos no ha sido capaz de contestar a una sola pregunta», ha asumido Miranda en un momento de su intervención.
Eloy Suárez, presidente de la comisión
En la misma mesa que Sánchez, a un asiento de distancia, estaba el popular Eloy Suárez, presidente de la comisión de investigación del Senado. Su papel era uno de los más comprometidos esta mañana, ante lo que se preveía como una sesión bronca. Así ha sido, llevando a Suárez a protagonizar alrededor de una decena de llamadas al orden, una retirada de la palabra y varias peticiones de «respeto» a la comisión ante las palabras de Sánchez -la ha calificado de «comisión de difamación»- y otros senadores.
También en recurrentes ocasiones ha tenido que interrumpir el presidente de la Sala a los parlamentarios por salirse del «objeto» de la comparecencia, y ha decidido ampliar el tiempo de palabra de algunos senadores al apreciar que Sánchez se alargaba en sus respuestas. El jefe del Ejecutivo se lo ha reprochado en tono irónico: «Me va a permitir que agradezca la imparcialidad del presidente [de la comisión]. Es sarcasmo». Cuando Sánchez ha dicho esto una segunda vez a media mañana, Suárez le ha reprochado que le critique a sabiendas de que, como presidente de la comisión, no puede entrar al choque: «Le agradezco su valentía con quien sabe que no puede debatir».

