Publicado: marzo 18, 2025, 7:07 pm
Veinticuatro horas después de que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil detuviera al empresarioagrícola Ginés Valiente como principal sospechoso dela desaparición forzosa, en 2021, del jornalero senegalés Ibrahima Diouf los agentes han arrestado en la tarde de hoy a su esposa.
El arresto de la mujer se ha producido tras diversos registros practicados por los agentes y, por el momento, no ha trascendido el grado de implicación que puede tener en los hechos que se investigan.
Este lunes fue registradala casa de la madredel principal sospechoso y hoy martes el garaje de la familia y las casas donde descansaban los jornaleros, así como otras propiedades anejas de la familia.
Valiente, que fue con anterioridad militar y al que la UCO le seguía la pista desde 2021, deberá pasar a disposición judicial como máximo el próximo jueves, que es cuando expira el plazo legal de 72 horas. El Juzgado de Instrucción número 1 de Villacarrillo ha declarado secretas las diligencias del caso.
Se da la circunstancia de que otro temporero africano, el maliense Tidiany Coulibaly, desapareció en diciembre de 2013 también mientras trabajaba para él. Los dos hombres se esfumaron tras tener un enfrentamiento con el empresario para reclamarles mejoras en sus condiciones laborales. Por esta desaparición, Valiente fue juzgado aunque quedó absuelto de la desaparición por falta de pruebas aunque resultó condenado por explotación laboral.
La convicción de los investigadores siempre ha sido la de que el jefe de los jornaleros tiene las respuestas sobre su paradero. La UCO comenzó registrando, el pasado septiembre, algunas propiedades de Ginés Valiente y después peinó su finca de ‘La Moratilla’ en busca de los cuerpos del senegalés Ibrahima Diouf (de quien nada se sabe desde enero de 2021) y del maliense Tidiany Coulibaly (desaparecido en diciembre de 2013). El registro de este latifundio de olivos de 7.000 metros cuadrados era crucial ya que ninguno de los dos jornaleros estuvo nunca en allí. Trabajaban en otro campo propiedad de su jefe. En enero de 2014, en plenas pesquisas por la desaparición del primer temporero, los agentes dieron a oler a un perro la bolsa del trabajador y después lo dejaron suelto en La Moratilla. Tidiany nunca trabajó en esa finca. El animal marcó un olivo con insistencia. Para los investigadores, estaba alertándoles de la presencia de posibles restos biológicos. El can encontró también unas orejeras del jornalero con restos orgánicos de Ginés, por lo que fue detenido. Sin embargo, tras el juicio el tribunal concluyó que la prueba indiciaria era débil y que no había prueba directa.
Al margen de registrar los dos latifundios de Valiente, en estos años la UCO ha procedido al vaciado de una poza de riego en un municipio próximo, la vivienda de Valiente y meses más tarde se centraron en los túneles ferroviarios en desuso de la antigua línea Baeza-Utiel y en los terrenos que la rodean. Por el momento, no se ha encontrado al jornalero.
