Publicado: abril 6, 2025, 4:05 pm
La Romareda ha vivido este domingo su primera fiesta en casi cuatro meses y 12 partidos después: el Zaragoza ha conseguido su primera victoria —también la primera de Gabi Fernández a los mandos después de tres partidos en el cargo— desde el 21 de diciembre tumbando al Mirandés (1-0) para volver a salir del descenso.
Los maños se impusieron en un partido trabado, con pocas ocasiones y menos remates entre los tres palos, gracias a una acción de estrategia en un saque de esquina que cabeceó a la red Jair Jr. en el minuto 78. La imagen de jugadores, cuerpo técnico y afición al final del partido, en una comunión total, ha dejado muy clara la importancia de estos tres puntos, pues los maños necesitaban el triunfo para abandonar una zona roja —se pone decimoctavo con un punto más que los alicantinos—en la que habÃan dormido tras el triunfo del Eldense este sábado.
De inicio, imperó el respeto sobre el césped del histórico estadio zaragozano, con toda la presión en el centro del campo y muchas dificultades para los dos para llegar con peligro al área rival. Aún asà el Real Zaragoza sorprendió al Mirandés en una jugada de Samed Bazdar, que, escorado, cruzó el balón en exceso.
Con mucho corte y poca continuidad, el juego prácticamente transcurrió en la zona media, aunque la afición local se llevó un susto mayúsculo cuando Joel Roca rompió el fuera de juego y Jair lo agarró dentro del área, lo que en principio era un penalti de libro. Por suerte para el equipo maño, que además podrÃa haber visto expulsado al jugador que más tarde le darÃa la victoria, el jugador ‘jabato’ estaba en fuera de juego en el arranque de la jugada.
El equipo aragonés se repuso de la taquicardia con un par de buenas acciones de Kervi Arriaga: un remate alto de cabeza en el área tras un saque de falta y un disparo raso que atajó bien el meta del equipo burgalés.
Hasta el final del primer tiempo dominaron los de Gabi Fernández a un Mirandés al que le costaba llegar al área rival, pero que tuvo una gran oportunidad en un mal despeje de Jair que fue hacia su propia porterÃa y que volvió a poner el corazón en un puño a la sufrida afición ‘blanquilla’.
En el regreso de vestuarios se vio a un Mirandés que intentó tener más el balón, lo que obligó al Real Zaragoza a defender más cerca de su área. Aún asÃ, el que primero tuvo la opción de marcar fue el conjunto zaragozano en un remate de Ager Aketxe que salió por encima del larguero. Replicó Iker Benito en el 72′, con un disparo que salvó el meta francés Gaetan Poussin con una gran intervención.
Con el partido casi atascado, el Zaragoza aprovechó un saque de esquina para hacer el único gol del partido. A partir de ahÃ, supo sufrir en defensa, apoyado constantemente desde una grada que entendió el momento delicado por el que atraviesa el equipo y que estalló en una ovación con el pitido final como si hubiera ganado un tÃtulo.
