Publicado: septiembre 18, 2025, 8:07 pm

La Unidad de Criminalística de la Guardia Civil concluye que los audios intervenidos a Koldo García en los que aparecen conversaciones con los ex altos cargos del PSOE José Luis Ábalos y Santos Cerdán no están manipulados y echa por tierra sus argumentos de defensa.
En el informe que acaba de presentar ante el Tribunal Supremo, al que ha tenido acceso EL MUNDO, concluye que «del análisis y estudio realizado no se han identificado trazas que evidencien alteraciones, manipulaciones o comportamientos anómalos en los audios objeto de estudio».
La Guardia Civil ha examinado los audios, en los que se abordaba el cobro de comisiones o el reparto de prostitutas, siguiendo instrucciones del Alto Tribunal. El juez ordenó «la práctica de una pericia al efecto de que se determine, en lo posible, si las conversaciones fueron grabadas directamente o si pudieran proceder de otros archivos de audio después grabados en aquellos», entre otras cuestiones.
«Igualmente, la pericia deberá extenderse a determinar si los archivos de audio contenidos en el informe policial de 5 de junio de 2025 resultan auténticos». «En el sentido», abundaba el juez, «de que pueda descartarse en términos de razonabilidad que hayan podido ser objeto de alguna clase de manipulación, corte o edición».
La Guardia Civil explica que ha procedido para el análisis a la «extracción» de todos los audios y que los ha sometido a un «proceso de inferencia» en el que el resultado es el mencionado, que no ha mediado ningún tipo de alteración.
Esto contrasta con las estrategias de defensa desplegadas por los principales investigados, que han sostenido que no reconocían su voz en los audios y, en el caso de Cerdán, ha llegado a apuntar a que la propia Guardia Civil había incurrido en ilegalidades para conseguir estos audios y aportarlos a la causa, acusando a Koldo García de ser un colaborador suyo en este apartado.
La defensa del ex secretario de Organización del PSOE asegura a este periódico, a la vista del informe de la Guardia Civil, que en uno de los apartados del mismo se reconoce que «los audios han sido editados después de la grabación» por lo que sigue manteniendo su tesis de que fueron manipulados.
Asimismo, subraya que la Guardia Civil ha constatado «la falta de metadatos temporales que permitan fijar la fecha de creación de los archivos» o que no han abordado «la atribución de voces a sus autores». Por lo que, a su juicio, «no basta con quedarse con la conclusión final» y avanza que, próximamente, aportarán al Supremo su propio informe pericial.