Publicado: marzo 19, 2025, 5:07 pm
La Unidad Central operativa (UCO) de la Guardia Civil ha pedido al Tribunal Supremo que le autorice a acceder a todos los productos financiaros donde el ex ministro José Luis Ábalos «figura o ha figurado como titular, autorizado y/o representante».
En un informe, al que ha tenido acceso EL MUNDO, la unidad de élite del Instituto Armado excluye de esta solicitud las cuentas bancarias relacionadas con el PSOE. Esta petición, aclaran los investigadores, obedece «continuar y completar la investigación patrimonial» de Ábalos.
En esta línea, la Guardia Civil pide al Supremo que libre un mandamiento judicial a entidades financieras como Caixabank «en aras de seguir avanzando en el esclarecimiento de los hechos investigados. Así, requiere todos los productos financieros «donde Ábalos figura o ha figurado como titular, autorizado y/o representante, excluidas las cuentas bancarias relacionadas con el PSOE». Pero también que se identifiquen las «cajas de seguridad» a su nombre y «todas las informaciones sospechosas de blanqueo de capitales que hayan participado al Sepblac sobre las cuentas bancarias, sus titulares o personas autorizadas». Asimismo, pide al Supremo que reclame información a la Agencia Tributaria sobre la Fundación Internacional de Apoyo al Desarrollo Local y Social (FIADELSO), gestionada por el ex ministro de Transportes y a la Generalitat para que aporte toda la documentación que tenga en su poder sobre esta entidad.
La UCO ha confeccionado lo que denomina un informe «preliminar» sobre el patrimonio del ex alto cargo socialista que «permite contextualizar su entorno familiar y financiero». Por lo que lo considera un «punto de partida de una serie de propuestas de actuaciones cuyo análisis detallado derivará, previsiblemente, en nuevas solicitudes de información». Entre los bienes a su nombre, la Policía Judicial señala varios vehículos, entre ellos, un Range Rover Sport de 2008 adquirido en 2021. Esta operación la considera «reseñable» toda vez que explica que la operación fue gestionada por Joseba García, hermano de Koldo García, su ex asesor personal y una persona que identifica como Bernardo Castillo Pérez y que sitúa «al círculo próximo de (Víctor de) Aldama«, empresario que ya ha confesado que le pagó comisiones al ex ministro socialista.
El chalé adquirido por parte de Ábalos en Colombia en 2003.
La adquisición del vehículo se produjo el 20 de agosto de 2021 a la empresa Calzados Arancha, S.L., por un importe de 15.000 euros. Añade la Guardia Civil que «en relación con esta adquisición, de análisis del teléfono intervenido al hermano de Koldo se observa que es quien lleva a cabo las gestiones para la compra de ese turismo con Bernardo Castillo Pérez, intermediando entre este último y Ábalos». «El hecho de la participación de Bernardo, quien a su vez ejerce de interlocutor con la empresa vendedora, resulta significativa ya que éste pertenecería en ese momento al círculo próximo de Aldama», subraya la UCO. Según la Guardia Civil, este individuo «se encuentra vinculado a Aldama societariamente a través de las sociedades Pilot Real Estate y Logistica Comercial Montelimar«. A su vez, agregan los investigadores que Castillo «ofreció durante la pandemia mascarillas a Koldo a través de Aldama».
Entre los elementos que destaca la UCO se encuentra también la existencia de transferencias bancarias realizadas por Koldo García a un hijo de Ábalos. «Ha resultado llamativo que Koldo fuera el encargado de transferir fondos a Carlos en varias ocasiones». En total la Guardia Civil reseña una quincena de operaciones de este tipo y alude a que existen conversaciones de Whatsapp entre el ex ministro de Transportes y su ex asesor personal en las que abordan estas transferencias.
A su vez, la Guardia Civil ha encontrado en un disco duro custodiado por Koldo García la documentación relacionada con la adquisición de un chalé por parte de Ábalos en Colombia. La operación se materializó el 22 de octubre de 2003 por 2,5 millones de pesos colombianos. Se trata, según el informe policial, de una vivienda en construcción en la zona de Tuluá. Este periódico se ha puesto en contacto con Ábalos, que explica que se desprendió de este inmueble en 2013 y rebate la valoración de dos millones de euros que hace la UCO en su informe subrayando que tiene un valor infinitamente menor.
