Publicado: febrero 22, 2025, 10:17 am
Víctor Wembanyama, llamado a marcar una época en la NBA, se perderá lo que resta de temporada por un coágulo sanguíneo detectado en su hombro derecho tras su primera participación en el All-Star. Una afección que, a priori, no debería ser un problema para su carrera pero que conviene no tomarse a la ligera: «El coágulo podría haberse trasladado al pulmón y haberlo matado».
Así lo ha confirmado el doctor Brian Sutterer, que ha apuntado a la tensión repetitiva de la vena bajo su clavícula al lanzar a canasta, por ejemplo, como la causa más probable de la afección, en Yahoo Sports, donde se ha mostrado «realmente impresionado» con la rapidez y eficacia de los médicos de San Antonio Spurs para localizarlo «en tan solo 24-48 horas».
«Lo aterrador de esto es que el coágulo probablemente estaba allí durante el All-Star y podría haberse desplazado al pulmón y haberle matado«, ha alertado el especialista en lesiones deportivas.
Con él ha coincidido el experto en medicina deportiva Hythem Shadid, que ha trabajado con la selección estadounidense de fútbol y con varios equipos universitarios: «Lo primero es conseguir un anticoagulante para estar seguros de que el coágulo no se mueva. No hay garantía de que no llegue a los pulmones, y si lo hace puede tener serias complicaciones«.
«Hay varias maneras para remover el coágulo. Normalmente se trata con un anticoagulante. En el caso de Wembanyama, al recibir muchos golpes en el campo, es importante que tenga cuidado antes de volver a la pista«, ha avisado, al mismo tiempo que ha detallado que, en estos casos, lo normal es practicar un venograma —un procedimiento diagnóstico por imágenes— «para entender exactamente dónde está el coágulo».
Respecto a qué tratamiento seguir, Shadid apunta a que «depende de cuánto es de grande el coágulo». «Hay que decidir si se remueve directamente en la vena, en cuyo caso hay un pequeño aparato que se hace pasar por la vena para remover el coágulo de la zona», ha detallado.
Pese a que este tipo de problemas son poco comunes, Wembanyama no es el primer jugador de la NBA en afrontarlo: Brandon Ingram se perdió 19 partidos en la temporada 2018/2019 por un problema similar, pero ha podido continuar compitiendo y actualmente es jugador de los Toronto Raptors; por otro lado, Chris Bosh, doble campeón con los Miami Heat, terminó retirándose de la NBA en 2017 tras sufrir por unos coágulos en 2015 y 2016.
